PUBLICADO EL VIERNES 8 DE AGOSTO DE 2003Alberto Noriega / CP“Exigimos la renuncia inmediata de Pablo Salazar Mendiguchía: así como la devolución inmediata de la instalación educativa y la libertad incondicional de los detenidos”, señaló Fortín Vázquez Pérez, líder de la Sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE); quien agregó “Chiapas volvió a recibir el saludo brutal del Gobierno paulista, en el corazón del movimiento magisterial de la Escuela Normal Rural Mactumatzá”.
Refirió que en gobiernos anteriores se habían dado salidas más civilizadas, “pero con este Gobierno represivo, déspota, necio y caprichoso, autoderminado “de la esperanza”, no se han recibido más respuestas de encarcelamientos, agresiones físicas y asesinatos, entre otros”.
El pronunciamiento marca la ruptura entre el Ejecutivo y el magisterio estatal. En conferencia de prensa, donde también estuvieron presentes alumnos de la escuela y padres de familia, el dirigente magisterial realizó severas críticas en contra del actual Gobierno chiapaneco, por el desalojo y detención de estudiantes de la institución educativa.
Violencia
La escuela Normal Rural Mactumatzá, sufrió el atentado más grande de la historia. Esta agresión brutal en contra de la comunidad estudiantil, compañeros maestros y de padres de familia acompañados por niños, nos hace irremediablemente recordar las matanzas de 1968 y 1971; es decir, este gobernador asesino de Pablo Salazar Mendiguchía, no tiene nada de diferente de los chacales de Díaz Ordaz y Luis Echeverría Álvarez, señaló. La sección 7, afirmó enfático Vázquez Pérez, “repudia la acción criminal que manifestó el 6 de agosto el Gobierno del estado, ordenando acordonar las instalaciones del plantel con fuerza policíaca y a las dos de la tarde con 10 minutos, empezaron a disparar, penetrando al mismo tiempo a la institución educativa, lo que dejo 200 detenidos, un número indeterminado de heridos y una docena de desaparecidos, los cuales exigimos que sean presentados con vida”.