Un colectivo de la R-126 le arrebató la vida
Paramédicos de Protección Civil del Estado efectuaron la valoración del motociclista y confirmaron su deceso.

A unos dos metros de su “caballo de acero” quedó sin vida “Nacho”, tras ser embestido por un colectivo en el libramiento Sur de Tuxtla Gutiérrez. El chofer del transporte presunto responsable abandonó la unidad junto con sus cuatro pasajeros.

El accidente ocurrió a las 21:15 horas del viernes en el libramiento Sur Poniente, justo a la altura de la entrada a la colonia Diana Laura, donde el colectivero iba “volando”, según testigos.

La víctima fue identificada como Ignacio de Arsea Sánchez, de 20 años. Se desplazaba sobre el carril de alta velocidad en su motocicleta marca Italika de color negro con amarillo y láminas N56CT.

El biciclo era conducido hacia el oriente sobre la citada vía, pero fue a la altura de la entrada a colonia Diana Laura donde la motocicleta de Ignacio fue embestida por la unidad de pasaje de la ruta 126-26 marca Nissan Urvan con placas de circulación 387198B que se desplazaba sobre la misma dirección.

Los testigos indicaron que la Urvan impactó y arrastró a la motocicleta varios metros al frente.

El colectivero intentó maniobrar a su derecha y en su loca carrera subió al andador y fue provocando destrozos en una barrera de protección de la construcción de una gasolinera.

Tras percatarse el colectivero de lo sucedido, decidió para abandonar la unidad y escapar hacia rumbo desconocido. Dentro del colectivo quedaron cuatro personas lesionadas en espera de ser auxiliadas.

Minutos después se presentaron paramédicos de Protección Civil del Estado, oficiales de Tránsito y Vialidad Municipal.

Tras efectuar la valoración, los paramédicos confirmaron el deceso del motociclista. Los pasajeros del colectivo, Omar Rivera Muñoz, de 35 años, Leonardo Guillermo Gómez Pinto, de 23 y Luis Manuel Moreno de 24; sufrieron contusiones.

Tiempo después de que los deudos reconocieran al motociclista, el cuerpo fue retirado del perímetro rodante y llevado a la morgue, mientras las unidades terminaron en un corralón.