En 1999 fue el estreno de la primera de tres entregas que marcarían este esperado retorno. George Lucas, creador de esta poderosa marca, mantuvo a los fans al filo de la butaca desde finales de los 90 y hasta el 2005 cuando la saga llegó a su fin (por aquél momento) con el filme La venganza de los sith, protagonizada por Ewan McGregor, Natalie Portman y el joven Hayden Christensen.

A pesar de las críticas, esta trilogía de precuelas logró un éxito rotundo en taquilla y entre los fanáticos. La carrera de Portman se catapultó, ganándose un premio Óscar años más tarde por la cinta El Cisne Negro.

McGregor, por su parte, es uno de los actores favoritos en Hollywood. Sin embargo, no a todos les fue bien: Hayden Christensen desapareció de los reflectores sin decir nada, ni un adiós.

En la saga de George Lucas, el personaje de Hayden Christensen era el del jedi Anakin Skywalker. Esta orden de guardianes viajaban por toda la galaxia para mantener el orden y la paz. Sin embargo, debido a una amenaza oculta se convierten en soldados de la República para luchar en contra de los Sistemas Separatistas.

Tras el poco éxito en su carrera como actor y pocas ofertas profesionales, Hayden se retiró de la actuación. Recientemente declaró al respecto: “Sentía que había conseguido algo grande con Star Wars, que me abriría muchas puertas y me formaría una carrera, pero también veía que era algo regalado. No quería vivir mi sintiendo que me había subido a la ola de la buena fortuna”.

Christensen, que tiene ahora 34 años, tomó en su día la determinación de dejar Hollywood e irse a vivir a una granja, donde ha llevado una vida tranquila. A pesar de su decisión, Hayden está consciente de lo importante que fue Star Wars en su vida: “Estoy muy agradecido a la saga galáctica porque me permitió tener todas esas oportunidades y una carrera.