Acusan a regidores de desestabilizar municipio

Autoridades municipales y tradicionales del municipio de Chalchihuitán, denunciaron que regidores de dicho Ayuntamiento están tratando de de-sestabilizar el municipio a través de una serie de amenazas a la población.

Dieron a conocer que Agustina Díaz Núñez, Javier Núñez Pérez, Mateo Pérez García y Marcela Pérez Núñez, regidores propietarios, así como Gloria Díaz Gómez, regidora plurinominal, están causando desorden social en el municipio.

Llamado

Indicaron que “es urgente detener estás acciones ilegales y llamar nuevamente a la responsabilidad y conciencia de estos regidores propietarios, antes que el pueblo y sus autoridades tradicionales tomen otras decisiones”.

Dijeron que el pasado domingo, a las siete de la mañana, se presentaron en los domicilios de la presidenta municipal, Elena Cruz Cruz, y de la síndico, Ramona de Jesús Sánchez Gómez; Venancio, Mauricio, Mateo, Javier, Florentino, Agustín Díaz Florentino, García Núñez, Ricardo Núñez López, entre otros, portando armas de fuego de diferentes calibres para amenazarlas y acosarlas, a fin de que se presentarán a las ocho de la mañana de este lunes en una casa particular.

“Lugar donde se han estado reuniendo con los familiares del exsíndico Hermelindo García Núñez, y en caso de no hacerlo deberán atenerse a las consecuencias; al retirarse estuvieron haciendo detonaciones de arma de fuego al aire para intimidar a la población”.

Manifestaron que el Ayuntamiento, desde la reinstalación de los regidores, quienes no se han presentado, ha venido trabajando con el pueblo.

“Ya han priorizado las obras públicas para este año 2020, la gente se encuentra contenta y satisfecha con la presidenta y la síndico, ya que han estado trabajando de manera coordinada con la presidenta municipal legítima, Sara Núñez Sánchez, y las demás autoridades administrativas y tradicionales”, indicaron las autoridades.

Conflicto

Expresaron que estas personas, quienes recientemente fueron restituidas, sostuvieron una reunión respetuosa con la presidenta y síndico ese mismo día, y en el cual asistieron a la sesión de Cabildo hasta la cuarta convocatoria.

A pesar de ello, indicaron que “durante y después de la sesión mantuvieron una actitud grosera de desacuerdo, amenazas y ataques verbales”.

Por todo lo anterior, solicitaron la intervención de las autoridades para que en el municipio impere el Estado de derecho.