En los últimos meses, de acuerdo a estadísticas del Centro de Integración Juvenil de Tapachula (CIJ), el consumo de sustancias adictivas ha aumentado de manera considerable en adolescentes del Soconusco, situación que preocupa a instituciones que trabajan en la prevención y atención de adicciones, ya que con mayor facilidad los menores de edad tienen contacto con drogas más adictivas y destructivas a su salud, como el cristal. 

Además de los daños a la salud, lo referente a lo económico, tanto del joven como de sus familias es preocupante, toda vez que de acuerdo a algunos consumidores de esta droga, un gramo de cristal en el mercado negro llega a costar 350 pesos y en promedio un adicto llega a consumir un gramo y medio cada vez que tiene acceso. 

Miguel Ángel Mancera Castillo, médico del Centro de Integración Juvenil (CIJ) Tapachula, dio a conocer que lamentablemente se ha detectado que adolescentes de la región del Soconusco han caído en el consumo de cristal, una de las drogas más destructivas a la salud, derivado de su accesibilidad. 

Dijo que es una situación preocupante porque anteriormente la atención de jóvenes adictos a esta sustancia ilegal no era muy común, sin embargo, en los últimos días han llegado a atender hasta cinco pacientes con graves problemas de adicción por mes. 

Indicó que lo lamentable es que los pacientes que han atendido son adolescentes que oscilan entre los 16 años y 17 años, quienes son poli usuarios, es decir, que no consumen un solo tipo de droga. 

El galeno detalló que el cristal tiene un gran potencial adictivo y puede generar daños irreversibles en la salud tanto física como psicológica de los consumidores, entre las que sobresalen la caída de dientes, descalificación de los huesos, ya que al ser una sustancia química, es veneno para el cuerpo.