La pandemia del coronavirus está dejando un fuerte impacto en la economía. Muchas empresas han cerrado y con ello miles han perdido sus empleos, lo que se refleja en que muchas familias ya no tienen los ingresos ni siquiera para adquirir productos básicos.
Esto se puede observar en el Banco de Alimentos de Tuxtla Gutiérrez, que ayuda a familias de bajos recursos con despensas completas a cambio de una cuota de recuperación que asciende a 200 pesos.
Gabriela Rozato, responsable de Procuración del Banco de Alimentos, detalló que si bien por un lado se tiene un incremento en el registro de familias en el último mes, que representa el doble de solicitudes que normalmente recibían, por el otro, muchas han dejado de asistir por sus paquetes alimenticios.
Indicó que muchas de las familias que recibían una despensa no acuden al Banco porque ya no pueden aportar la cuota de recuperación, por la falta de recursos económicos.
“Los efectos de la pandemia en la economía son evidentes y palpables, mucha gente se ha quedado sin trabajo en distintos sectores y mucha gente vive al día. Lo que estamos viendo es que si antes de la pandemia esas familias estaban en una condición de vulnerabilidad, ahora se ha hecho más aguda”, declaró.
Hasta el mes de abril el padrón de beneficiados era de dos mil 773 familias y durante mayo se agregaron alrededor de 200 familias más, que son aproximadamente mil personas.
Detalló que gracias al apoyo de otras fundaciones de la red nacional, están preparando a partir de la próxima semana entregar paquetes alimenticios de manera gratuita a personas que por esta contingencia se hayan quedado sin trabajo, a adultos mayores y en colonias marginadas.
Están trabajando en un registro para que comiencen a entregar las despensas gratuitas, y las personas en condición de vulnerabilidad puedan contar por lo menos con los productos básicos.
Indicó que las cadenas comerciales continúan realizando aportaciones; afortunadamente hasta el momento las donaciones son las necesarias para beneficiar a las familias registradas.
Los volúmenes en los productos que reciben no han variado, pero desafortunadamente la necesidad va creciendo.
Mencionó que las familias que solicitan las despensas habitan en las colonias de la periferia de la ciudad capital, principalmente del lado oriente norte y poniente sur, como Terán, Plan de Ayala, Las Granjas, Patria Nueva, Potinaspak, entre otras.
Están también buscando ampliar las zonas de influencias buscando incluir nuevas colonias, ubicadas rumbo a Chiapa de Corzo en las cercanías de los miradores del Cañón del Sumidero y la zona del aeropuerto, a donde no han llegado y sí tienen necesidad, sobre todo ahora que la pandemia está generando una fuerte inseguridad alimentaria.