El Centro de Textiles del Mundo Maya, localizado en el edificio del ex convento de Santo Domingo de Guzmán de esta ciudad, realizará en este periodo vacacional de verano diversos talleres gratuitos.
El centro textil informó que las actividades están dirigidas a niños de ocho a 12 años de edad, quienes podrán conocer, experimentar, jugar, reciclar, aprender, divertirse y vivir el patrimonio cultural.
Los cursos gratuitos iniciarán el próximo 15 de julio al 9 de agosto, de lunes a viernes de 9 a 13 horas.
De esta manea el Centro de Textiles del Mundo Maya, institución formada por el Patronato de la Colección Pellizzi, La Casa de la Comunidad de Tejedoras Mayas (antes Sna Jolobil) y financiada por Fomento Cultural Banamex A.C. y Fomento Social Banamex A.C., a través de su área de Servicios Educativos, tendrá como siempre, innovadoras sorpresas para los niños en este verano 2019.
Señaló que por quinta ocasión, su laboratorio creativo, en colaboración con artistas voluntarios y estudiantes prestadores de servicio social de la Universidad Iberoamericana, desarrolló las actividades que se ofrecen durante cuatro semanas de manera gratuita, sin necesidad de inscripción, ya que se da la libertad para que los niños asistan a los talleres que deseen.
“Cada semana se trabaja un tema diferente y cada día se realiza una actividad distinta. Eso sí, se recomienda puntualidad, ya que en nuestro exitoso Verano el cupo es limitado”.
Dio a conocer que este año, durante 20 días, se ofrecen cuatro talleres con contenidos de interés actual, encaminados a la reflexión sobre la protección del medio ambiente, combinados con saberes artísticos milenarios para el goce, el acercamiento y la mejor comprensión de uno de los más grandes legados de la cultura maya: el arte textil.
El hilo conductor de los talleres es la naturaleza, su apreciación y respeto, tal y como lo practicaban los antiguos mayas. Es por ello que escogimos para nuestra imagen gráfica la ceiba sagrada, diseño tomado de un huipil guatemalteco de la comunidad de San Pedro Sacatepéquez, que representa la vida en la tierra.
Así también aparecen los cuatro rumbos, que corresponden a los cuatro puntos cardinales, que representan elementos de la vida y la muerte. «En este verano abordaremos aspectos de la flora, la fauna, la cultura e historias del Mundo Maya, como una manera de inculcar de manera creativa y recreativa, el conocimiento y amor por nuestras culturas regionales».