La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) recibe a diario un promedio de 300 solicitudes de asilo, de las cuales más de 200 se presentan en sus oficinas en Tapachula, donde se concentran miles de migrantes.
Ello demuestra que a pesar de los operativos instrumentados por las autoridades federales, la frontera sur del país permanece abierta al ingreso de extranjeros de diferentes nacionalidades.
En los primeros cuatro meses del año, la Comar ha recibido 31 mil 842 peticiones de refugio, cuando durante todo el año pasado fueron 41 mil 223, y en el 2019 al darse las caravanas y todavía sin pandemia de covid-19, se registraron 70 mil 422.
Los números demuestran el aumento de la migración, aunque supuestamente miles de elementos del Instituto Nacional de Migración, Guardia Nacional, Secretaría de la Defensa Nacional, Marina-Armada de México y autoridades estatales, permanecen resguardando la franja fronteriza con Guatemala.
“Es un cierre ficticio, porque no pasa el que no quiere”, señalan empresarios que ven un alto riesgo en materia de seguridad y de salud, por la presencia de miles de migrantes en Tapachula.
De acuerdo con el último reporte de la Comar, unos 15 mil 842 extranjeros que solicitaron refugio de enero a abril proceden de Honduras; cuatro mil 315 de Haití; tres mil 91 de Cuba; dos mil 460 de El Salvador; mil 818 de Venezuela; mil 615 de Guatemala; 672 de Nicaragua; 555 de Chile; 289 de Colombia; 234 de Brasil; y 951 de otras nacionalidades, sobre todo extracontinentales.
De todas las solicitudes, en Tapachula se han registrado 22 mil 234 y en Palenque 596, en lo que corresponde a Chiapas; tres mil 900 en la Ciudad de México; dos mil 860 en Tabasco; mil 320 en Baja California; y mil 32 en Veracruz.
Para hacer notar el incremento de la migración, la Comar precisa que en abril del 2019 ingresaron cinco mil 690 extranjeros que pidieron refugio; en el mismo mes pero del 2020 fueron solamente 971. Y en el 2021, la cifra llegó a nueve mil 189.
Con relación a los meses de este año, precisa que en enero registraron a seis mil 537; en febrero, siete mil 38; en marzo nueve mil 78; y en abril nueve mil 189, siendo un aumento paulatino.
Las autoridades consideraron que el año pasado la migración descendió a causa del covid-19, sin embargo, en el 2021 va en un aumento constante y no hay visos de que se detenga a pesar de la prevalencia de la pandemia.
A diario, en las inmediaciones de las oficinas de la Comar, se aprecian cientos de migrantes en busca de ser atendidos en sus solicitudes de refugio, aunque ello genera inconformidades entre los vecinos de la zona donde se ubican y acusan de inseguridad y riesgos en materia de salud.
Por ello, piden a las autoridades federales y estatales intervenir para instrumentar acciones de vigilancia y módulos de verificación sanitaria permanentes, ya que éstos no cumplen con las recomendaciones mínimas de la sana distancia y el uso de cubrebocas.