Nuevo modelo electoral, en manos de legisladores

Las modificaciones que se puedan dar al “nuevo modelo electoral” quedarán en manos de los diputados federales y ellos decidirán si se conservan los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLEs) o si existen reducciones a los partidos políticos en sus prerrogativas, puntualizó Arturo De León Loredo, vocal ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE) en Chiapas.

En ese sentido, explicó que, una vez que se decida este tema en la Cámara Alta, los funcionarios electorales tendrán que hacer efectiva la nueva Ley y, quienes estén inconformes de las decisiones, tienen a su disposición los recursos jurídicos.

“Corresponde al Poder Legislativo aprobar las leyes que rigen, actualmente, la convivencia de todos los ciudadanos y de las instituciones con los ciudadanos”, complementó en relación al “modelo deseable”.

Opciones

Dentro de los planteamientos que se han hecho, es que exista una reducción del presupuesto para los partidos políticos (50 por ciento menos del dinero que reciben) como otra forma de austeridad; no obstante, recientemente el INE aprobó cinco mil 239 millones de pesos para todos los partidos políticos para el 2020 y eso que no es un año electoral.

De esta cantidad multimillonaria, el partido en el poder (Morena) accederá a más de mil 700 millones de pesos; su rival más cercano, el PAN, apenas tendrá 950 millones de pesos.

Chiapas

En lo que respecta al ámbito local, el último acuerdo del Consejo General del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) estableció que, para el 2019, el financiamiento público para los partidos políticos asciende a los 129 millones 281 mil pesos, es decir, 41 millones 117 mil 960 pesos menos que lo establecido en el 2018.

Para estos meses, Morena recibirá del erario local 41 millones 658 mil 797 pesos con 41 centavos; en tanto, la oposición más cercana, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) tendrá a su disposición 20 millones 674 mil 82 pesos con 79 centavos.

Contexto

El actual Modelo Electoral tiene su origen más reciente en 2014, donde los OPLEs tenían atribuciones y funciones en las elecciones locales, mientras que al INE lo dejaron como un organismo regulador de las votaciones a nivel nacional.

El momento de mayor tensión, se vivió en el 2018 por la cantidad de cargos que estaban en juego; la disputa electoral terminó por darle el poder a una nueva corriente partidista.

“Nadie cuestionó el modelo, todos los que ganaron y recibieron su constancia festejaron el funcionamiento del modelo, por eso cuando se pone el tema de la reforma, los legisladores abrieron la posibilidad para la discusión y el diálogo y el intercambio con los OPLEs, con el INE, con los académicos”, refirió De León Loredo.

Esta apertura legislativa, consideró, traerá como consecuencia que las modificaciones den resultados positivo para un Sistema Electoral que siga funcionando, que dé certeza a los ciudadanos y a los que compiten; de lo contrario, será un modelo que, en lugar de resolver problemas, generará nuevos conflictos.

Postura

El pasado 7 de agosto de este año, en el Seminario sobre la Reforma Electoral, celebrado en la Ciudad de México, el consejero presidente del IEPC, Oswaldo Chacón Rojas, opinó que, más allá de hablar de la desaparición de los organismos locales, lo que se debe implementar son mejores mecanismos que impidan el ingreso de dinero ilícito durante los comicios y que aumenta el clientelismo electoral.

En su opinión, que las votaciones sean centralizadas, puede generar desconfianza entre la población y el objetivo principal de austeridad o ahorro económico, no se resolverá.

En tanto, el delegado del INE en Chiapas, dijo que no quiere adelantarse para hablar sobre la organización de las elecciones en forma centralizada, pero los resultados del sistema actual son palpables en todas las instancias jurisdiccionales y fiscalizadoras que hay en el país.

No obstante, uno de los aspectos que resaltó, fue que la autonomía en el Instituto no la construyeron ellos, fue decisión de los legisladores federales y esto ha significado que muchos actores políticos no estén contentos, pero se hizo para servirle mejor al país.

Centralizar las elecciones, explicó, implicará que el INE tenga que resolver hasta el mínimo de problemas (incluyendo votaciones locales) pero esta modalidad aún no se ha implementado y habría que esperar (si es que sucede) la decisión que tomen los legisladores federales.

Finalmente, De León Loredo aclaró que, lo que han realizado hasta ahora, no ha generado cuestionamiento de los actores políticos; por el contrario, quien pone el acento para las nuevas reformas, son los que están en el poder, contrario a lo que ocurría en años anteriores donde la oposición insistía en estos temas.