Un mes más de clases no solucionará retraso

José Luis Zúñiga Basilio, representante de la Asamblea Estatal Democrática de la Sección 40, comentó que la medida de incrementar un mes al ciclo escolar 2021-2022, anunciado por la Secretaría de Educación Pública (SEP), será de poco o nulo beneficio ya que no solucionará el retraso educativo que ha significado más de un año sin clases presenciales.

Dijo que nuevamente se observan las imposiciones y medidas unilaterales por parte de las autoridades educativas federales, sin tomar en cuenta al magisterio y sobre todo a la población, solamente toman el consenso de hacer cambios al ciclo escolar o al sistema educativo en general, los determinan e imponen.

“Pensar que con un mes se va reponer más de año y medio de suspensión de labores en las escuelas es absurdo, eso no va abatir el rezago educativo. Lo que se necesita es mayor compromiso de la autoridad por fortalecer la infraestructura, dotar de insumos necesarios para hacer frente a la pandemia, más mobiliario, equipo, útiles y libros”, declaró.

Mencionó que para este ciclo escolar sólo modificarán dos libros de texto gratuito de cada nivel educativo y el resto quedará igual, lo que por supuesto tampoco servirá para superar el retraso educativo por la pandemia. Eso da a entender que la pandemia sirvió para que las autoridades educativas se enfocaran en otras cosas.

El representante del bloque adherido al Sindicato-Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE-CNTE), insistió en que pensar que establecer un mes más de trabajo, tanto para el magisterio como para los alumnos, va a revertir el retraso, es una idea errónea, ya que deberían hacer otras modificaciones y medidas que realmente ayuden a los alumnos.

Indicó que lo único que terminarán por generar con esta medida, si es que llega a concretarse, será un rechazo de todo o gran parte del magisterio, esto mientras no se complemente una serie de acciones que son urgentes en la educación, sobre todo en estados como Chiapas, que poseen un alto rezago en cuanto a infraestructura física educativa.

Refirió que en la entidad las autoridades educativas siguen argumentando que la prioridad es atender los centros educativos afectados por el terremoto del 2017, incluso a más de tres años, pero “ni baja el recurso de ese año, ni lo del Fonden, y ni destinan para el resto de las escuelas, que siguen en el abandono”.

Ahora se suman las escuelas que no han sido atendidas desde el terremoto al deterioro en miles de escuelas que han permanecido por más de un año sin actividades presenciales, ya que muchas tuvieron que despedir al personal de limpieza y mantenimiento, porque sus salarios por lo general se obtienen de las cuotas que aportan los padres de familia.

El docente apuntó que a estas alturas la mayoría de los padres y madres de familia siguen en la misma postura de terminar el ciclo escolar a distancia, debido a que no existen las condiciones de seguridad necesarias, tanto para sus hijos como para ellos, esperando que para el siguiente ciclo realmente se vea el trabajo de la autoridad encargada para que las escuelas regresen a sus actividades presenciales.