Una nueva etapa se vive en el Guadalajara, y tiene que ver con la visión de su propietario, quien enumera los nuevos “mandamientos” con los que deben caminar las Chivas; el primero de ellos, deja claro que nunca habrá alguien por encima de la institución.
Ahora, bajo el mando de Amaury Vergara se respira un aire diferente, pero con la exigencia de siempre, que es poner al club rojiblanco en el lugar que se merece dentro del Futbol mexicano, la Liga MX.
El corto tiempo de la gestión de Amaury ha dejado claros ciertos puntos que buscan mejorar la convivencia y actitud de trabajo al interior del club, intentando colocar al Rebaño como un equipo con una base sólida.
Al llegar al club, encontró un grave problema: La pérdida de valores e identidad, mismas que se propuso recuperar y mejorar con el objetivo de regresar la esencia al interior del equipo.
“Hubo una pérdida de identidad y de valores hacia el interior, no hacia la construcción de la marca y lo que significa nuestro club. Algo en lo que estamos trabajando es en fortalecer los valores del club, que se han venido construyendo y nuevos valores que hacen falta para los tiempos de hoy”, indicó.
Amaury puso de ejemplo a Jerry Krause, gerente general de los Bulls de Chicago, en cómo la ambición por ser el foco de atención puede terminar por perjudicar a una institución, situación similar que se vivió con José Luis Higuera, con quien concluyeron la relación laboral y ahora, es analista deportivo.
“Esa necesidad de reconocimiento, la necesidad del protagonismo y eso puede ser muy tóxico para una organización, porque vemos cómo se toman decisiones totalmente irracionales”, argumentó.
Amaury Vergara participó en el foro Sports Innovation Society. El dirigente del Rebaño dejó buena impresión por el manejo que tiene en el Guadalajara.