¿Alguien será capaz de frenar al Real Madrid en la temporada 2022-23? Por lo pronto el Eintracht fue el primero que lo intentó y fracasó en la Supercopa de Europa, primer trofeo del conjunto Merengue para sus vitrinas en este año que fue obtenido sin mayor preocupación en la cancha del Estadio Olímpico de Helsinki.
El Real Madrid comenzó con el pie derecho su torneo y sigue demostrando su hegemonía en Europa, donde nadie parece capaz de arrebatarle la etiqueta de favorito para ganarlo todo. Y de paso, Carlo Ancelotti sigue agrandando su leyenda con más trofeos conseguidos (logró su cuarta Supercopa de Europa).
Eintracht salió a buscar el resultado; eran solamente 90 minutos para definir al ganador, así que nada perdía. Por esta razón, pudo haber sido una historia distinta si tan solo Daichi Kamada hubiera marcado el primer gol del encuentro en ese mano a mano a los 13 minutos frente al portero Thibaut Courtois.
Pero el arquero “merengue” lució con una atajada abajo, donde el japonés intentó superar al espigado guardameta pero no lo logró porque la velocidad de reacción del belga fue superior a la fuerza del balón. Tras ese susto, fue cuestión de tiempo antes de que el Real Madrid metiera su primer gol del partido, y este llegó a los 36 minutos gracias a una jugada de táctica fija.
Después de un tiro de esquina, Karim Benzema logró rematar el balón hacia la zona donde estaba Casemiro, quien en vez de intentar el gol, decidió volver a centrar de cabeza el esférico para David Alaba, quien solo empujó a las redes la redonda para el 1-0.
El segundo tanto llegó a los 62 minutos cuando Benzema, quien ya superó al mítico Raúl González, consiguió rematar en el centro del área un pase de Vinicius que el arquero no supo ni cómo atajar pese a que iba al centro de la portería. Marcador 2-0 y vámonos a La Liga.
El Real Madrid logró así su quinta Supercopa de Europa, y tal y como ocurrió en la disputa de este trofeo en 1960, le volvió a ganar al Frankfurt (aquella vez fue un 7-3).