“Tury Junior”, heredero de una gran dinastía

A los 12 años regularmente se puede a ver a un niño jugando Futbol, corriendo por las calles, yendo de un sitio a otro, pegado a los videojuegos, entre otras actividades. Pero para Ricardo Pascual Coutiño Hernández, su pasatiempo favoritos es informarse sobre la actividad del Boxeo y la Lucha Libre.

Es heredero de una de las dinastías más reconocidas en dichas disciplinas, pues su abuelo José Raquel Coutiño Mancilla (q.e.p.d.) y su papá José Manuel “Nelo” Coutiño Espinosa han dedicado su vida a la promoción deportiva, y Ricardo, “Tury Junior”, como ya es conocido, quiere mantener ese legado.

“Tenía diez años cuando mi papá me comenzó a meter en su programa ‘Ring Tury’, y ahí comenzó a nacer en mí el ‘gusanillo’ de la Lucha Libre y el Boxeo”, señala, y agrega que en su primera participación no ocultó su felicidad y su emoción, pues reconoció que la oportunidad de estar frente a una cámara hablando de lo que le apasiona pocas veces sucede.

El talento lo lleva en la sangre. Se le nota cuando comienza a hablar y a enumerar datos específicos sobre los momentos más importantes, principalmente del mundo boxístico en el estado, el cual su abuelo se encargó de hacer crecer.

“Mi abuelito comenzó a hacer Boxeo en Chiapa de Corzo en 1957, en la desaparecida Casa del Pueblo. Después emigró a Tuxtla Gutiérrez, en la Arenilla México, y para 1976 nace el Deportivo Roma”, destaca, entre otros datos que solo los más conocedores y veteranos amantes de este deporte saben.

Reconoce que no es fácil llegar a hablar de lo que él conoce, por lo que, en determinado momento, “Tury Junior” se da el tiempo de sumergirse en el mundo de las revistas, los carteles, folletos, y demás herramientas que guarda celosamente su señor padre “Nelo” Coutiño.

“Leo casi todos los días durante una hora. Leo libros de Boxeo y Lucha Libre, ‘Súper Luchas’, todos los libros relacionados con estos deportes. También me pongo a leer los carteles de mi abuelito, cuando traía al Santo, Blue Demond, Black Shadow, entre otras de las muchas leyendas que él trajo al Deportivo Roma”, menciona con gran orgullo.

Ricardo no conoció a su abuelo, don Raquel Coutiño, sin embargo, tiene muy presente, a su corta edad, que el apellido que porta tiene mucho peso en la industria, en la que su familia se ha movido por años, por lo que espera llegar a mantener ese legado intacto, hacerla crecer y darle su toque especial, sin olvidarse de sus raíces.

“Es una gran felicidad cuando oigo hablar de mi abuelito. Él fue muy reconocido en el estado y a nivel nacional. Mi papá les puede hablar a luchadores como el Hijo del Santo y, con solo decir el apellido, él responde que conoció a mi abuelo, y es un gran orgullo tanto para mi papá como para mí”, expresó.

Si bien su camino recién está comenzado, “Tury Junior” cuenta con todo el respaldo de su papá, “Nelo” Coutiño, quien también le ha enseñado a reconocer quiénes lo apoyarán y quiénes solamente buscarán aprovecharse de él.

“Mi papá siempre me ha dicho que hay que darle paso a las buenas y a las malas críticas. Hay muchas personas que dicen que estoy muy verde aún; no le tomó mucha importancia, pues sé que llegaré a ser alguien en la vida”, finaliza Ricardo Pascual Coutiño Hernández.