A unos días de que se realice el movimiento “Un día sin mujeres”, como respuesta a la ola de violencia de género que se vive en el país; la actriz Bárbara de Regil acepta que ella ha vivido acoso desde que era niña.

“Desde los 12 años. Desde que me sucedió algo, siempre he sido muy directa en lo que no me gusta. En una ocasión un productor me tocó una pierna, le agarré la mano, se la quité y le dije ‘¿todo bien?’, y se sintió ofendido, pero no me importó”, relató.

También recordó que hubo proyectos donde la intentaban besar y cuando no lo permitía curiosamente ya no se quedaba; pero a pesar de los malos momentos que vivió no piensa revelar los nombres de quienes se aprovecharon de su posición para ofenderla así.

“Creo que la evidencia te la pone la vida. Hay una persona en especial que se trató de pasar conmigo, y no siento que sea por eso, pero hoy tiene cáncer. La vida siempre es un ‘boomerang’, tú avientas y te regresa”, dijo.

Para la actriz parte de la solución al problema de la violencia y asesinatos en el país, es la educación que los niños y niñas reciben en sus hogares y no lo ven en la televisión.

“Las mamás les enseñamos a los hijos que lo que está en esa pantallita es mentira. Hay que educar con amor, con seguridad, para que tengamos adultos buenos. Entonces sí es importante hablando del movimiento, que las mamás nos pongamos a luchar, pero si tenemos hijos en casa educarlos: no se insulta a una mujer, no es un triunfo que te la ‘eches’, es un ‘¡oye, cuídala!’”, agregó.

Desesperadas

También opinó sobre las reacciones que han tenido las mujeres durante las protestas, donde ha habido desde pintas hasta destrucción de inmuebles. “Está muy bien, yo creo que ya estamos desesperadas y ese punto lo veo como, ya no sabemos que más hacer para que esto pare”, declaró.