España Peregrina, espectáculo multimedia de poesía, música y danza, que cuenta la historia de la República Española de 1936 y el posterior exilio que tocó a México y a la UNAM proteger y asimilar, se presentó en el Foro del Tejedor, a 80 años del Exilio Español Republicano.
El espectáculo, producido por Walhalla, Arte Independiente en Escena, creado y dirigido por Ricardo López Espinosa, integra teatro, danza y música como el entorno ideal para echar un vistazo a la poesía de Alberti, Machado, Miguel Hernández, César Vallejo, León Felipe y Ángela Figuera Aymerich, con el objetivo de resaltar la importancia del momento histórico al que pertenecieron.
“Hace un par de años realicé un trabajo poético sobre León Felipe, lo abordé desde su poesía, pero también desde la perspectiva de que fue un hombre de su tiempo que supo encarar el ataque de los fascistas, y fue un exiliado con gran activismo en México, además hizo una revista, ‘España Peregrina’, donde publicaban muchos exiliados. León Felipe fue parte de la defensa de la República en una época en la que la poesía se convirtió en una arma de lucha; están Alberti, Vallejo, Hernández para demostrarlo”, explica en entrevista López Espinosa.
A partir de este trabajo, el violinista, lector y director del espectáculo, especialista en trabajos interdisciplinarios, creó España Peregrina acompañado de Naty Lomas, actriz y cantante; Raúl Mandujano, guitarrista, especialista en flamenco tradicional y contemporáneo; y Nuria Rubio, bailarina de gran ductilidad que transita del flamenco al contemporáneo.
“Con un gran rigor histórico reunimos las canciones de trinchera que ayudaban a levantar la moral durante los combates, la danza hizo una traducción en movimiento de la poesía y de las historias que se están contando, e incorporamos un multimedia de 700 imágenes para crear una semántica visual. Con la poesía de Alberti, Machado, Ángela Figuera, César Vallejos y Miguel Hernández, vamos contando la historia”, indica López.
La primera parte de España Peregrina cuenta cómo el pueblo, en la brevedad de la República y durante la Guerra Civil que le siguió, defendió su libertad y combatió a las fuerzas fascistas de forma heroica. Esto se presenta en el escenario con un tono sobrio que da fe del temple, casta y convicción con que parte de España asumió su compromiso con la historia.
La segunda parte, en un ambiente más coloquial, muestra a un par de personajes perplejos que, al perderlo todo, sienten el riesgo manifiesto de perder su identidad; en el trance se preguntan quiénes son y cuántas veces ha tenido España que gritar para situarse en la historia.