En 1971, cuando Roberto Fernández Retamar publicó Calibán. Apuntes sobre la cultura de Nuestra América, que es considerado uno de los más importantes textos ensayísticos de la literatura y lengua española del siglo XX, el poeta, ensayista, profesor universitario, diplomático y periodista cubano que falleció el sábado a los 89 años en La Habana, forjó un símbolo de lucha a partir de ese personaje tomado de La Tempestad de William Shakespeare.
A través de Calibán, Fernández Retamar abogaba por una relectura de la historia desde la mirada del explotado y del colonizado, al tiempo que indagaba en América Latina desde una perspectiva política comprometida con la Revolución Cubana, y desde ese texto criticaba las posturas de algunos de los miembros de la intelectualidad y la izquierda latinoamericana.
El poeta y ensayista nacido en La Habana, el 9 de junio de 1930, fue autor de varios libros, entre los que destacan La poesía contemporánea en Cuba. 1927-1953, Idea de la estilística, Ensayo de otro mundo, Introducción a Cuba y Para una teoría de la literatura hispanoamericana, otra de sus obras cumbre.
Autor de Órbita de Rubén Martínez Villena (1964), de la selección y el prólogo de la antología Cinco escritores de la Revolución rusa (1968) y de la antología de poesía Para un mundo amasado por los trabajadores (1973); en colaboración con Fayad Jamís, Fernández Retamar compiló la antología Poesía joven de Cuba (1959).
El fundador, en 1977, del Centro de Estudios Martianos, que dirigió hasta 1986; y presidente de Casa de Las Américas desde 1986 hasta su muerte, fue también miembro de la Academia Cubana de la Lengua, la cual dirigió entre 2008 y 2012, y miembro correspondiente de la Real Academia Española; en 1989 obtuvo el Premio Nacional de Literatura. Además fue designado profesor de mérito de la Universidad de La Habana en 1995.