Frida Sofía no pudo ser diagnosticada en su adolescencia con trastorno límite de la personalidad como señaló su madre Alejandra Guzmán, explica Ileana Romero Martínez, fundadora del colectivo TLP México y del movimiento “más información menos estigma”. En una entrevista con Adela Micha, la cantante negó la denuncia pública de abuso que Frida hizo contra su abuelo, Enrique Guzmán.

“Tuve que mandar a Frida a un colegio porque trataron de secuestrarla y ella tenía apenas 12 años… el último año se le diagnosticó ‘border personality’ yo fui al colegio y un terapeuta me dijo de esta condición y desde entonces he tratado de ayudar a Frida tenerla bajo medicamentos”.

Al respecto, Ileana, quien además tiene diagnosticado el trastorno, señala: “En la entrevista de la señora Alejandra Guzmán, ella indica que le fue diagnosticado a los 14 o 15 años a Frida, lo cual no puede ser porque, al ser un trastorno de la personalidad, no puedes diagnosticarlo en la adolescencia sino hasta la etapa adulta, que es cuando la personalidad está mejor formada, que es entre los 20 y los 21 años aproximadamente. Esto es muy importante de destacar porque quiere decir que tal vez ni siquiera el trastorno está diagnosticado como tal”.

A través del colectivo TLP Borderline México, esta tarde se lanzó un comunicado en favor de Frida Sofía y descalificando que Guzmán hiciera ver que quienes viven con ese trastorno de la personalidad tuvieran entre los síntomas el mentir. La propia modelo replicó en sus redes sociales. “Lo que está haciendo Alejandra Guzmán lo hemos vivido también las personas que tenemos una condición de salud mental, ha sido la historia de muchas de nuestras familias, de nuestras parejas que nos desacreditan e invalidan y simplemente dicen ‘tú estás loco, loca y entonces no vales, no es válido lo que dices, lo que sientes”, sentencia Ileana Romero Martínez.

Preocupa que Alejandra desinforme

La vocera de la organización está en contra de que se desinforme a la gente alrededor del tema de la salud mental, sobre todo por el alcance que al ser una figura pública como la llamada “reina de corazones” pueda tener.

“No tiene relación el mentir o la mitomanía con el diagnóstico del TLP. (Queremos) hacer evidente que hay ciertos factores emocionales emocionales, de abuso físico, sexual o psicológico que se viven en la niñez o la infancia que podrían detonar el trastorno lo cual implica que el hecho de desvalidar, atacar o decir que algo no es cierto y ponerle los adjetivos de loca o loco, trastornado, enfermo mental, es en realidad también una agresión no solo a una persona sino a toda una comunidad que diariamente se preocupa por atender su salud mental”, señaló.

“La mayoría de las personas se quedan con lo que dice y piensan ‘claro las personas con TLP son mentirosas, chantajistas, manipuladoras, se inventan cosas, cambian de estado de ánimo de un día para otro’, y este tipo de comentarios que no están apoyados por la información, por una preocupación clara en la salud mental lo único que genera es que haya más estigma y rechazo”, añadió.

En qué consiste el TLP Ileana, quien además de padecer el trastorno se ha dedicado a estudiarlo y actualmente está también enfocada en educar al respecto, explica que consiste en altibajos emocionales. Además, aclara que un patrón persistente es la inestabilidad tanto en las emociones, el afecto, las relaciones interpersonales y la autoimagen, así como características de impulsividad. “Esto quiere decir que las personas con TLP vivimos en una montaña rusa emocional”, dice.

“Pero además hay síntomas de depresión, ansiedad, autolesiones, baja autoestima y por supuesto que esto lo que genera es que pueda haber crisis tanto de tristeza, enojo y por supuesto el entorno tiene mucho que ver ya sea en el apoyo de los que vivimos con esta condición o que se pueda hacer más agudo el trastorno”, explicó, y también dijo que quienes tienen la facultad de hacer un diagnóstico son los psicólogos y psicólogas clínicos o un psiquiatra.