Que se prendan las alarmas, porque unos huevitos dorados han sido secuestrados y llegan hasta África, donde dicen, nació la vida. “¡Ya no sabemos ni qué inventar para la saga!”, dice el cineasta Gabriel Riva Palacio, al hablar de su nuevo filme. El largometraje al que se refiere es Un rescate de huevitos, cuarta entrega del proyecto que nació en 2006 de la mano de su hermano Rodolfo.

Los pequeños robados son hijos de Toto, el personaje central, cuya voz es del actor Bruno Bichir. En la anterior película, este llega a la vida adulta. “Estos huevitos salen con un color peculiar y parecen de oro, entonces un coleccionista de huevos los roba porque organiza subastas y se los lleva a África y ahora que está de moda ‘El rey león’, pues nosotros también tenemos uno con la voz de Chucho Ochoa”, refiere Gabriel.

Se espera que Un rescate de huevitos llegue a salas en 2020, pero Riva Palacio comenta que ya se está trabajando en la siguiente entrega, Un gallo congelado. “De esa, lo que podemos decir, es que los huevitos llegan al Polo Sur”, indica el entrevistado. En paralelo se encuentran levantando un guión que lleva por título La olimpiada cavernícola.

Sin oportunidad

Desde hace al menos cuatro años los hermanos Riva Palacio tienen bajo el brazo una serie sobre vampiros en live action, pero comentan que nadie les hace caso. “Cuando llegamos nos preguntan si son huevitos vampiros y no, nos ven con cara de que somos personas de animación y no podemos hacer otra cosa”, comenta.

“Estamos luchando para cerrarlo, pero no lo logramos, nos ‘estigman’ por los huevos”, explica.