El contagio acelerado y la inmunidad de rebaño

Las peores semanas en Chiapas están por venir. En tanto en un inicio de la epidemia en el país, reconfortaba de cierto modo el hecho de que en nuestro estado hubiera tan pocos casos confirmados y muy pocos decesos a causa del covid 19, ahora que a nivel nacional se ha anunciado que algunas ciudades han entrado en la etapa de descenso, el panorama en Chiapas se torna distinto, pues hoy es claro que nosotros vamos apenas agarrando fuerza en la escalada de la curva epidémica.

Al día de ayer la Secretaría de Salud del Estado reportó en su tradicional conferencia de las 13:00 horas, 654 casos confirmados y 53 defunciones acumuladas; se sumaron a la lista 44 nuevos casos confirmados, en tato al corte del viernes se añadieron a la lista 68 nuevos casos y 37 el día previo. Estamos a un paso de que los contagios se sumen por cientos, después de lo cual, recordemos (considerando la experiencia nacional y la de otros países en los que la epidemia inició antes que en el nuestro), los contagios se empezarán a contar por miles.

El gobernador Rutilio Escandón Cadenas se refirió este sábado a la población chiapaneca para informar que de acuerdo a las declaraciones del Consejo de Salud de Chiapas, las siguientes semanas serán de alto contagio en la entidad, por lo que urgió a la población a cuidarse y a implementar las medidas de prevención de contagios dentro y fuera del hogar. El día de ayer, domingo, en un emotivo mensaje, el mandatario nuevamente se refirió a su pueblo, al que pidió no confiarse y tomar todas las medidas necesarias para evitar los contagios.

La alta movilidad que ha habido en algunos municipios de Chiapas y en especial en su capital Tuxtla Gutiérrez, donde se ha incumplido con muchas de las medidas sanitarias por parte de su población, ha sido la principal razón por la que los contagios se dispararon fuertemente durante los últimos días en esta ciudad. No hay que olvidar que en una epidemia, la población es en gran medida responsable de la propagación del mal; los gobiernos están obligados a orientar y a preparar la infraestructura de atención hospitalaria, pero son los ciudadanos quienes con su comportamiento pueden acelerar o disminuir la velocidad de contagio.

El gobierno estatal hecho un trabajo ejemplar. Desde antes de que se detectara el primer caso de covid 19 en Chiapas, la planeación para el abastecimiento y la reconstrucción hospitalaria ya había iniciado en el estado; posterior a eso el monitoreo y el barrido casa por casa mostró la cohesión de un gobierno organizado y preparado para dirigir acciones de combate ante eventos como el que vivimos. El equipo técnico dirigido por el Dr. José Manuel Cruz Castellanos mostró gran capacidad para combinar el modelo nacional con el monitoreo de brigadas que recorrió y sigue recorriendo todos los rincones de la entidad, incluidas sus zonas indígenas.

Ahora toca a los chiapanecos (a todos), mostrar de qué madera estamos hechos, toca a cada uno de nosotros desde nuestras trincheras asumir un comportamiento responsable que permita disminuir la velocidad de la transmisión del virus y eventualmente lograr detener su dispersión. Corresponde a los presidentes municipales también, redoblar esfuerzos para mantener seguros a los habitantes de sus demarcaciones. Tuxtla Gutiérrez en particular tiene un foco rojo y urge a las autoridades de ese municipio emprender un trabajo emergente con sus ciudadanos antes de que las cosas se les salgan de control.

El camino a recorrer todavía es largo y no sólo para Chiapas, sino para todo México y para el resto del mundo. No hay vacuna contra el virus y seguramente pasará un buen número de meses antes de que podamos confiar en este recurso para evitar más decesos. Tampoco hay cura, lo que vuelve las cosas aún más complicadas. Lo único a lo que podemos apostarle hoy es a la administración del contagio para que se pueda garantizar la atención hospitalaria y eventualmente ir logrando la inmunidad en masa.

¿Pero cuánto falta para lograr esa también llamada inmunidad de rebaño con la que se espera proteger a manera de cerco sanitario a la población más vulnerable de nuestro Chiapas, de nuestro México y del mundo? No lo sabemos. De acuerdo a los expertos, para que este fenómeno biológico pueda ser efectivo en una población, el 70 % de su gente debe haber desarrollado la inmunidad, la cual hoy en día sólo podría obtenerse al contagiarse y recuperarse posteriormente de la enfermedad.

Algunos países comenzaron a difundir la semana pasada los resultados de sus estudios al respecto, en Francia el Institut Pasteur publicó una amplia investigación en la revista Science, donde afirma que su población, con todo y sus más de 28 mil muertes y más de 140 mil casos confirmados de contagios, tiene hoy en día sólo el 10 % de inmunidad. En España, donde han muerto más de 27 mil personas y donde el contagio contabilizado asciende a más de 230 mil, el Ministerio de Salud presentó el resultado preliminar de sus investigaciones, en el que afirma que sólo el 5 % de su población tiene dicha inmunidad. Por su parte, en Estados una investigación en el mismo rubro arrojó que el estado de Nueva York cuenta hoy en día una inmunidad del 25 %.

México anunció el viernes pasado que paralelo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, se iniciarán las encuestas serológicas en el país, método a través del cuál se pretende conocer el porcentaje de mexicanos que han desarrollado la inmunidad al SARS-CoV-2. Dicha encuesta, que incluye un levantamiento de datos demográficos de las personas estudiadas, comprende un análisis de sangre para identificar los anticuerpos IGM e IGG, los primeros se estiman que duran en el cuerpo humano tan sólo algunos meses, pero los últimos permanecen y permiten la adaptabilidad de la especie humana a la nueva enfermedad. #QuédateEnCasa

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