Acabó la rifa, pero el show debe continuar

¿Y usted qué dijo? Ya se rifó el avión presidencial, sin avión, y ahora sí vámonos a hablar de otros temas… Pues fíjese que no, el show continúa, debe continuar. Esto es similar a los postulados de Vicente Fernández, y mientras el público no deje de votar, no se deja de hacer política electoral, el show no acaba.

Seguramente usted, que es un conservador marca diablo, ya quería que el presidente Andrés Manuel López Obrador comenzara a hablar de esos temas que solo a usted le interesan… como, por ejemplo, la estrategia para contener la pandemia y los 72 mil muertos, pero no se le va a hacer.

El show continúa y la siguiente función tiene que ver con el resultado de la solicitud que AMLO realizó para que se haga una consulta ciudadana para decidir si los expresidentes Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña deben ser sometidos a juicio.

Desde el pasado día 15 de septiembre la Suprema Corte de Justicia de la Nación tiene 20 días para decidir si la consulta es o no viable, pues tendrá que determinar si la pregunta que el presidente López Obrador propone hacer a los ciudadanos es constitucional o no. Así que, para empezar, ya hay material hasta para unas 20 mañaneras y no dejar que el show acabe.

En caso de que la Corte decida que sí es constitucional tendremos show para rato, pues entrará en escena el Congreso donde la consulta deberá ser aprobada por ambas Cámaras, lo que podría llevar el tema hasta el fin de año o principios de 2021.

Y la cereza del pastel: la consulta se pretende, al menos así lo quiere el Presidente, para levantar el mismo día de la jornada electoral del próximo año, por lo que durante todos los días entre hoy y la fecha de la elección de 2021 el tema podrá ser abordado a diario por AMLO.

¿Y si la Suprema Corte dice que la pregunta es inconstitucional se acaba el show? No mi estimado fifí, ni lo sueñe. Si el máximo tribunal del país no avala la pregunta, lo único que se cae es la consulta ciudadana, pero nunca, el show.

Imagine qué sucederá si los ministros de la Corte dicen que no a la posibilidad de hacer una consulta para juzgar a los expresidentes del PRI y el PAN, varios de ellos campeones de la corrupción. Sin duda, de aquí al día de la elección el tema sería: que, por fin, cuando un gobierno honesto, austero, transparente, humanista y cristiano, como lo es el actual, se decide a perseguir a la mafia que tuvo sometido al país los últimos 30 años, el Poder Judicial impidió que se hiciera justicia y que los ministros votaron por la impunidad. Le digo, el show está garantizado. ¡Y aquí no hay aquello de devuelvan las entradas, no señor!

Pero como no solo de aviones y consultas vive la autollamada Cuarta Transformación, el mismo Presidente ya le dio ayer un adelanto de lo que está por venir. Aunque los adversarios y la prensa vendida han criticado la rifa del avión -en la que no se rifó el avión-, bajo el argumento de que esta buena obra, para recaudar fondos y así comprar equipo médico, fue solo un montaje -que además, salió muy caro- pues el gobierno acabó por comprar muchos de los billetes de lotería.

Los conservadores vieron mal, nada raro pues nada les acomoda, que en los últimos días la 4T gastara 500 millones de pesos para comprar un millón de cachitos para la rifa y regalárselos a varios hospitales, para que en caso de que se sacaran un premio –cada billete ganador tendría un premio de 20 millones de pesos-, pudieran utilizar ese dinero en equipamiento o remodelaciones…

Según los críticos, hubiese sido mejor dar directamente esos 500 millones a algunos hospitales, pero si se hubiera hecho de ese modo se habría privado a los pacientes y médicos de los hospitales de la emoción que generan los juegos de azar. Pacientes y médicos estaban con el alma en un hilo escuchando a los gritones de la lotería en espera de volverse millonarios y poder mejorar su centro de salud. Darles esa emoción no tiene precio.

Y dado éxito de la rifa del avión, el presidente López Obrador ya le encontró gusto a esto de la emoción del juego y dijo que pronto vendrán rifas de más aviones, ranchos, residencias, yates, joyas y muchos otros bienes de alto valor que el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado tiene en su poder como parte de los decomisos a criminales o evasores de impuestos.

“Estamos pensando que para el año próximo vamos a hacer uno así, uno muy grande… el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado tiene muchos inmuebles, se tienen ranchos, residencias, aviones, yates, alhajas y ahora con la Ley de extinción de dominio es seguro que lleguen los bienes”, dijo ayer el presidente López Obrador.

Así que la 4T no solo seguirá haciendo hogares felices, sino que lo mantendrá a usted muy entretenido con rifas y sorteos para que no esté pensando todo el día en pandemias y muerte, en violencia y crimen, o en que su empresa cerró y que usted perdió su empleo y no tiene para la renta o el chivo.

A cambio de rifas y mucha diversión, lo único que usted tiene que dar a cambio es su voto en la elección de 2021, para que cada día más mexicanos en los estados estén gobernados por un miembro de la 4T, y para que el partido del Presidente mantenga, o de preferencia incremente, su mayoría en el Congreso.

Que el show continúe…

ME CANSO GANSO.- UNA FUNCIÓN MUY CARA

La llamada rifa del Avión Presidencial, entregó 100 premios de 20 millones de pesos cada uno. La lista oficial de ganadores quedó así:

Empresarios: 40 premios.

Lotería Nacional: 16 premios.

Insabi: 13 premios.

Sindicatos: 5 premios.

No vendidos: 24 premios.

Si las matemáticas y el doctor López-Gatell no mienten 84 de los 100 premios se quedaron en manos de los hombres del dinero, a quienes les cambiaron tamales por millones de pesos; en las del gobierno, que gastó dinero público para comprar billetes de lotería y en las de los sindicatos, que gastaron el dinero de sus agremiados para quedar bien con el Presidente y quedarse con unos cachitos. Fue caro, pero fue un buen show. ¿A poco no?