El próximo 26 de septiembre dejará su sitial de Reina sin serlo, una mujer que ha estado 16 años en el poder político de una de las grandes potencias.

Ha roto todos los paradigmas, el primero de ellos ¿cómo una mujer pudiese ser la líder política de un país? Lo logró con creces y con la gran admiración de sus ciudadanos a los que gobernó.

Otro fue haber gobernado Alemania durante cuatro legislaturas y, ello debido a que su trayectoria ha sido excepcional, donde su popularidad nunca bajó del 50%.

Por si fuera poco, ha sido recordada como la canciller de la austeridad, contra aquellos que critican este tipo de políticas. Ella lo llevó desde su discreta vestimenta hasta su efímero cuerpo de seguridad.

Dirigió a una potencia que es la primera economía europea y una de las más importantes del mundo. En cuanto a lo económico, el balance es positivo: ha reducido el desempleo y ha crecido a un mejor ritmo, redujo la deuda y realizó un sinfín de inversiones en políticas sociales.

Apoyó a sus socios europeos en la crisis del euro, pero su carácter y ejemplo de austeridad lo aplicó en los rescates económicos, además, de exigir reformas que combatieran los déficits fiscales, ejemplo de ello fue Grecia.

Dentro de sus títulos nobiliarios en su reinado se pueden mencionar entre otros: en el 2005 se convirtió en la primera mujer canciller de Alemania, (así se denomina al jefe de Gobierno en Alemania). En el 2007 fue la presidenta del Consejo de la Unión Europea, recibió la Medalla Presidencial de la Libertad que le otorgó el expresidente Barak Obama. En 2015 la revista Time la nombró canciller del mundo libre y la francesa Le Point la llamó “La Patrona que puede salvar a Europa de la crisis sanitaria”.

Fue militante de Juventud Libre Alemana. En 1991 fue parte del gobierno del entonces canciller federal Helmut Kohl, siendo ministra para la mujer y la juventud. En su momento pintó su raya con su exjefe y mentor, el citado Kohl, por el escándalo de la financiación ilegal del Partido Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU).

No faltarán los críticos como en todo ámbito, pero lo que es innegable: es la mejor evaluada por sus ciudadanos. Ha habido en el mundo otras mujeres también con liderazgo político como Margaret Thatcher, pero entre ellas existen sus diferencias como sería la sencillez que caracteriza a la alemana.

Física de profesión y casada en primeras nupcias con Ulrich Merkel, de quien se divorció en 1982 conservando el apellido Merkel, casándose en segundas con Joachim Sauer, sin tener descendencia.

Actuó como una Reina por ser una mujer que tiene los mejores atributos. Fue despedida con seis minutos de aplausos en su último discurso oficial. Como sabes me refiero a Angela Merkel, una de las figuras más importantes en la política de las últimas décadas. Su ejemplo será seguido por muchas mujeres que sobresalen en la vida política de cualquier país. Bienvenidas todas aquellas que sigan el ejemplo de Angela.

Twitter: @UlrichRichterM