“Changuti”, una bella tradición chiapacorceña

Hace 52 años, Julio César Toledo Velázquez salió por primera vez vestido de chuntá con su abuela Flora de la Cruz Hernández, la fundadora de la pandilla “Changuti”, una de las más antiguas y que mantiene el lado chusco y extravagante de este importante personaje de la Fiesta Grande de Chiapa de Corzo. Las calles de la ciudad colonial entonces lucían diferentes, había pocas casas en el barrio, entre ellas la de doña Flora, quien era identificada por un árbol de mezquite plantado al frente. Entonces, en los días de fiesta las y los chiapacorceños hacían sus propias máscaras de platos de cartón. La mayoría usaba ropa común, “nomás con una mascarita pintadita, como se pudieran hacer; mis hermanos salían de gorilas, salían así, de personajes como de Clavillazo, Cantinflas”, relató Julio a Cuarto Poder. Eran excéntricos los disfraces a pesar de la sencillez, “tenía que ver más con la creatividad, algunos asustaban, otros daban risa, había de todo”. Hacían bromas propias del personaje que representaban, “si era un g