Clausuran plantas de aceite de palma

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró tres plantas extractoras de aceite de palma y un banco de material, acciones que expusieron un patrón de negligencia ambiental por descargas clandestinas de aguas residuales sin tratamiento, evasión de pagos federales y operaciones al margen de la ley. Goteo de negligencia Las plantas clausuradas pertenecían a la Cooperativa Unión de Palmicultores de la Costa de Chiapas, Pakal Consultores en Agronegocios del Sureste y Aceitera Chiapaneca La Palma, que operaban en los municipios de Acapetahua y Villa Comaltitlán con irregularidades constantes. Ninguna contaba con autorización para descargar aguas residuales, pese a generar líquidos tóxicos durante la extracción del aceite. Además de sistemas de tratamiento inexistentes o defectuosos que provocaron la infiltración de contaminantes como nitrógeno, fósforo y bacterias coliformes en suelos y zonas aledañas, incluyendo una laguna de oxidación. “Estos residuos contienen contaminantes como nitrógeno