De la tradición a la ciencia

En el corazón de Tuxtla Gutiérrez, la herbolaria tradicional ha encontrado un puente con la ciencia. Luis Alberto Cerecedo, químico chiapaneco, desarrolla extractos de plantas curativas endémicas de la región. Su laboratorio, ubicado en la ciudad, combina el conocimiento ancestral zoque con procesos científicos modernos, ofreciendo alternativas para tratar padecimientos como la diabetes, la hipertensión y el pie diabético. Fitoquímica El químico chiapaneco especializado en fitoquímica, se dedica a la producción de extractos naturales a base de plantas endémicas de Chiapas y del sureste de México. Desde su laboratorio, ubicado en la Novena Sur de la capital, Cerecedo transforma especies como el guarumbo, utilizado para regular los niveles de glucosa, el maguey morado con propiedades antiinflamatorias, la chilchagua de San Cristóbal, el caulote y el cardamomo para el sistema digestivo, entre muchas otras. Con métodos como la maceración en cristal y la extracción por rotoevaporador, sus productos se envasan en g