Si bien todo en todo el país hay prevalencia de enfermedades transmitidas por vectores, el sureste tiene mayores problemas por la gran diversidad que presenta. Chiapas junto con Oaxaca albergan la mayor biodiversidad del país. La principal es el dengue. José Antonio de Fuentes, investigador y docente de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), comentó que actualmente hay una gran cantidad de enfermedades transmitidas por vectores que anualmente provocan millones de muertes a nivel mundial, México no es la excepción, sobre todo en el sureste. A nivel nacional la principal enfermedad transmitida por vectores es el dengue, ya que el mosco se reproduce casi en cualquier parte que tenga las condiciones mínimas, por eso el sistema de salud se ha enfocado en su combate a través de diferentes acciones. La enfermedad de chagas también representa una amenaza para la salud, ha sido poco estudiada, pero ha estado bastante presente; igual la malaria es de mayor abundancia. Investigación Eduardo Espinos
Dengue y chagas con prevalencia en Chiapas
Si bien todo en todo el país hay prevalencia de enfermedades transmitidas por vectores, el sureste tiene mayores problemas por la gran diversidad que presenta. Chiapas junto con Oaxaca albergan la mayor biodiversidad del país. La principal es el dengue. José Antonio de Fuentes, investigador y docente de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), comentó que actualmente hay una gran cantidad de enfermedades transmitidas por vectores que anualmente provocan millones de muertes a nivel mundial, México no es la excepción, sobre todo en el sureste. A nivel nacional la principal enfermedad transmitida por vectores es el dengue, ya que el mosco se reproduce casi en cualquier parte que tenga las condiciones mínimas, por eso el sistema de salud se ha enfocado en su combate a través de diferentes acciones. La enfermedad de chagas también representa una amenaza para la salud, ha sido poco estudiada, pero ha estado bastante presente; igual la malaria es de mayor abundancia. Investigación Eduardo Espinos