Hoy como ayer, los tuxtlecos nuevamente tenemos la oportunidad de realizar paseos o excursiones campestres en el antiguo Parque Madero como antaño: admirar la naturaleza, aspirar el aire limpio, escuchar el alegre canto de los pájaros, hacer recorridos a pie por las serpenteantes veredas del jardín botánico o estudiar para los exámenes en las frescas, pero tranquilas bancas campestres; irse a refrescar a la antigua alberca pública “Francisco I. Madero”, disfrutar los diversos juegos infantiles (la rueda de la fortuna, los caballitos, avioncitos, lanchitas y carritos) o los ricos raspados de crema con plátano. A la vera del camino se hallan muchos árboles de mango. En este amplio espacio, tranquilo y fresco, los niños de ahora podrán disfrutar nuevamente –los sábados y domingos- juegos infantiles de épocas pasadas, como “La gallina ciega”, “A la víbora de la mar”, “A las escondidas”, “Arroz con leche”, “La rayuela”, “Campanita de oro”, “De cuerda”, “Del aro”, “De encantados”, de arranca repollo, burro al hoyo,
¡El antiguo “Parque Madero” ha resucitado!
Hoy como ayer, los tuxtlecos nuevamente tenemos la oportunidad de realizar paseos o excursiones campestres en el antiguo Parque Madero como antaño: admirar la naturaleza, aspirar el aire limpio, escuchar el alegre canto de los pájaros, hacer recorridos a pie por las serpenteantes veredas del jardín botánico o estudiar para los exámenes en las frescas, pero tranquilas bancas campestres; irse a refrescar a la antigua alberca pública “Francisco I. Madero”, disfrutar los diversos juegos infantiles (la rueda de la fortuna, los caballitos, avioncitos, lanchitas y carritos) o los ricos raspados de crema con plátano. A la vera del camino se hallan muchos árboles de mango. En este amplio espacio, tranquilo y fresco, los niños de ahora podrán disfrutar nuevamente –los sábados y domingos- juegos infantiles de épocas pasadas, como “La gallina ciega”, “A la víbora de la mar”, “A las escondidas”, “Arroz con leche”, “La rayuela”, “Campanita de oro”, “De cuerda”, “Del aro”, “De encantados”, de arranca repollo, burro al hoyo,