Una de las celebraciones más controvertidas por ser ejemplo de resistencia cultural de los zoques de Tuxtla Gutiérrez, es la fiesta de San Pascualito, la cual se realiza en la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa Mexicana Independiente. San Pascualito, conocido también como San Pascual Muerte, San Pascual Rey o Santo de la Buena Muerte, es venerado en Guatemala y en Chiapas. Su culto surgió coincidentemente con las fechas de la peste que durante el siglo XVII asoló Guatemala. San Pascual Baylón fue fraile de la orden franciscana. Nació en Torrehermosa, Aragón (España), el 16 de mayo de 1540, y falleció en Villarreal, Castellón (España), el 17 de Mayo de 1592. Fue beatificado en octubre de 1618 por el papa Pablo V y canonizado hasta el 16 de octubre de 1690 por el papa Alejandro VIII. La llegada de pestes llevó a relacionar a San Pascual Baylón con la muerte, pero como un ente positivo. Se le rezaba a San Pascual para que curara a los enfermos, sin embargo, si se trataba de una persona que no tuviera remedio,
Festejo a San Pascualito en Tuxtla
Una de las celebraciones más controvertidas por ser ejemplo de resistencia cultural de los zoques de Tuxtla Gutiérrez, es la fiesta de San Pascualito, la cual se realiza en la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa Mexicana Independiente. San Pascualito, conocido también como San Pascual Muerte, San Pascual Rey o Santo de la Buena Muerte, es venerado en Guatemala y en Chiapas. Su culto surgió coincidentemente con las fechas de la peste que durante el siglo XVII asoló Guatemala. San Pascual Baylón fue fraile de la orden franciscana. Nació en Torrehermosa, Aragón (España), el 16 de mayo de 1540, y falleció en Villarreal, Castellón (España), el 17 de Mayo de 1592. Fue beatificado en octubre de 1618 por el papa Pablo V y canonizado hasta el 16 de octubre de 1690 por el papa Alejandro VIII. La llegada de pestes llevó a relacionar a San Pascual Baylón con la muerte, pero como un ente positivo. Se le rezaba a San Pascual para que curara a los enfermos, sin embargo, si se trataba de una persona que no tuviera remedio,