En Tapachula, la prostitución femenina ha crecido derivada de la situación económica y la migración, sin embargo, también un sector de hombres, en su mayoría extranjeros y estudiantes le han entrado a este oficio. Ellos lo hacen de manera más discreta y muchos utilizan redes sociales, agencias y lugares predestinados a este tipo de encuentros. De acuerdo a estimaciones, en Tapachula, abiertamente ejercen la prostitución unos 200 hombres según la presidenta de la organización Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer y de la Red Mexicana de Trabajo Sexual, Elvira Madrid Romero. De ese total se estima que unos 150 son migrantes que han encontrado en esta actividad una forma de obtener ingresos y además en algunos casos mantener a su familia. Sobre los clientes de estos prostitutos poco se habla, pero la mayoría son mujeres acomodadas de clase media que pueden pagar los servicios que van desde los 800 hasta los mil 500 por una sesión que puede durar más de una hora. También hay hombres que no reconocen su atracción
Incrementa la prostitución masculina en Tapachula
En Tapachula, la prostitución femenina ha crecido derivada de la situación económica y la migración, sin embargo, también un sector de hombres, en su mayoría extranjeros y estudiantes le han entrado a este oficio. Ellos lo hacen de manera más discreta y muchos utilizan redes sociales, agencias y lugares predestinados a este tipo de encuentros. De acuerdo a estimaciones, en Tapachula, abiertamente ejercen la prostitución unos 200 hombres según la presidenta de la organización Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer y de la Red Mexicana de Trabajo Sexual, Elvira Madrid Romero. De ese total se estima que unos 150 son migrantes que han encontrado en esta actividad una forma de obtener ingresos y además en algunos casos mantener a su familia. Sobre los clientes de estos prostitutos poco se habla, pero la mayoría son mujeres acomodadas de clase media que pueden pagar los servicios que van desde los 800 hasta los mil 500 por una sesión que puede durar más de una hora. También hay hombres que no reconocen su atracción