La quema no debe seguir: especialista

“Nuestros ancestros nos dejaron la milpa, pero la quema ya no puede continuar. Ahora debemos pensar en la salud del suelo, en el medio ambiente y en la vida misma. Quemar contamina, erosiona y empobrece la tierra. Y, aún más grave, pone en riesgo a los ecosistemas y a las personas”, expresó José Moisés Rodríguez Castellanos, colaborador del Centro Internacional para el Mejoramiento del Maíz y el Trigo (Cimmyt) en Ocosingo. En el marco del Día Internacional del Combatiente de Incendios Forestales, el Cimmyt insistió en ver a la milpa más allá de un sistema productivo, sino como una herencia ancestral que ha alimentado a las familias campesinas durante generaciones. Sin embargo, prácticas como la rosa, tumba y quema -aunque comprensibles en otros contextos- hoy resultan insostenibles. Nuevo enfoque Desde hace más de seis años, Rodríguez Castellanos y su equipo trabajan con productores locales para fortalecer el sistema milpa desde un nuevo enfoque: la milpa biodiversificada, cuyo fin es combinar el cultivo tra