“Un sector de la población católica asegura que el león o ‘tigre’ con alas que se encuentra en la fachada de la catedral de Tuxtla Gutiérrez es el nagual de San Marcos, que vive en las inmediaciones del volcán Chichón”, resaltó el antropólogo social, Félix Báez-Jorge, en un análisis a las regiones indígenas zoques de Chiapas. El doctor en etnohistoria de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), que falleció en 2023, realizó una de las investigaciones más aclamadas por la comunidad académica: “Entre los naguales y los santos: religión popular y ejercicio clerical en el México indígena”. Entrevista El autor, en 1982, en sus trabajos de campo, entrevistó a Juan Pérez, un residente de Ocotepec, quien explicó cómo la comunidad creía que las fuerzas sobrenaturales los protegían de la devastación de la erupción. De acuerdo a las palabras que rescata de Juan: “Ocotepec se salvó porque lo protegió San Marcos, el santo patrón del pueblo, partía las piedras con sus rayos”, de hecho le contó que después de
León de San Marcos, nagual del volcán Chichón
“Un sector de la población católica asegura que el león o ‘tigre’ con alas que se encuentra en la fachada de la catedral de Tuxtla Gutiérrez es el nagual de San Marcos, que vive en las inmediaciones del volcán Chichón”, resaltó el antropólogo social, Félix Báez-Jorge, en un análisis a las regiones indígenas zoques de Chiapas. El doctor en etnohistoria de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), que falleció en 2023, realizó una de las investigaciones más aclamadas por la comunidad académica: “Entre los naguales y los santos: religión popular y ejercicio clerical en el México indígena”. Entrevista El autor, en 1982, en sus trabajos de campo, entrevistó a Juan Pérez, un residente de Ocotepec, quien explicó cómo la comunidad creía que las fuerzas sobrenaturales los protegían de la devastación de la erupción. De acuerdo a las palabras que rescata de Juan: “Ocotepec se salvó porque lo protegió San Marcos, el santo patrón del pueblo, partía las piedras con sus rayos”, de hecho le contó que después de