Ir a pedir dulces con la tía Anita en la Residencial La Hacienda, se ha convertido en una tradición para todas y todos los tuxtlecos. Tan es así, que el año pasado 14 mil niños y niñas acudieron al altar de la profesora Ana María y todos recibieron dulces; el tío Pelón, Juan Carlos Mendoza Castañeda, invita este año a toda la población a acudir este primero de noviembre a partir de las seis de la tarde. En una entrevista telefónica, el tío Pelón detalló que el año pasado La Hacienda conglomeró a un aproximado de 30 mil personas. En su casa, se vivió la algarabía y verbena popular, hubo luz, sonido y una larga fila de niños entusiastas que en conjunto recibieron un total de mil 700 kilos de golosinas. Legado El tío Pelón relata que el entusiasmo de realizar este evento es continuar con el legado de su madre, a quien, en una entrevista previa, describió como una maestra ejemplar que siempre tuvo grandes detalles con los niños y puso en alto los actos de compartir y seguir las tradiciones. “Independientemente de
Listos para calabacita de la tía Anita
Ir a pedir dulces con la tía Anita en la Residencial La Hacienda, se ha convertido en una tradición para todas y todos los tuxtlecos. Tan es así, que el año pasado 14 mil niños y niñas acudieron al altar de la profesora Ana María y todos recibieron dulces; el tío Pelón, Juan Carlos Mendoza Castañeda, invita este año a toda la población a acudir este primero de noviembre a partir de las seis de la tarde. En una entrevista telefónica, el tío Pelón detalló que el año pasado La Hacienda conglomeró a un aproximado de 30 mil personas. En su casa, se vivió la algarabía y verbena popular, hubo luz, sonido y una larga fila de niños entusiastas que en conjunto recibieron un total de mil 700 kilos de golosinas. Legado El tío Pelón relata que el entusiasmo de realizar este evento es continuar con el legado de su madre, a quien, en una entrevista previa, describió como una maestra ejemplar que siempre tuvo grandes detalles con los niños y puso en alto los actos de compartir y seguir las tradiciones. “Independientemente de