Los tamales han formado parte de la gastronomía mexicana desde hace miles de años, modificándose los ingredientes y técnicas de elaboración hasta nuestros días. Fanny López Jiménez, arqueóloga chiapaneca, indicó que desde los mayas y los aztecas ya se consumían y se servían como ofrendas para los dioses. Proyecto La docente de la licenciatura en Arqueología de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) dijo que trabaja en un proyecto de investigación sobre tamales mayas, junto con la doctora Laura Elena Sotelo, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Se han representado en diferentes imágenes, murales, vasijas, códices y ollas, con los dioses; no solo en la cultura maya sino en distintas culturas de Mesoamérica; hay imágenes en códices del siglo 15 donde están ofrendando o están dando a la población. La idea es estudiar cómo algunas personas siguen utilizando incluso los mismos objetos desde la época prehispánica para moler el maíz, como el metate y el molcajete. También qué tanto h
Los tamales, un alimento milenario
Los tamales han formado parte de la gastronomía mexicana desde hace miles de años, modificándose los ingredientes y técnicas de elaboración hasta nuestros días. Fanny López Jiménez, arqueóloga chiapaneca, indicó que desde los mayas y los aztecas ya se consumían y se servían como ofrendas para los dioses. Proyecto La docente de la licenciatura en Arqueología de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) dijo que trabaja en un proyecto de investigación sobre tamales mayas, junto con la doctora Laura Elena Sotelo, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Se han representado en diferentes imágenes, murales, vasijas, códices y ollas, con los dioses; no solo en la cultura maya sino en distintas culturas de Mesoamérica; hay imágenes en códices del siglo 15 donde están ofrendando o están dando a la población. La idea es estudiar cómo algunas personas siguen utilizando incluso los mismos objetos desde la época prehispánica para moler el maíz, como el metate y el molcajete. También qué tanto h