La vegetación que existe dentro del Parque Deportivo del Oriente fue la ideal para convertirse en el nuevo hogar de una hembra coatí de nariz blanca, especie que ha habitado desde hace más de 15 años en los alrededores y a quien personal y deportistas del lugar han llamado cariñosamente "Martina", la mascota que se ha convertido en la favorita de los visitantes. Mientras "Martina" se pasea entre los árboles de las canchas de basquetbol, muchos curiosos se acercan para alimentarla con frutas y a su vez aprovechan para sacarle fotos, así como acariciarla. Personal encargado de la supervisión del parque, asegura que es un animal que con el tiempo se ha domesticado y se ha acostumbrado al contacto con las personas, lo que hace que no sea considerado un animal peligroso. Esta especie es comúnmente conocida como tejón mexicano, sin embargo, el nombre real de esta especie es coatí o "Nasua narica", y nada tiene que ver con el tejón, el cual sólo habita en Europa. Esta confusión en los nombres se remonta desde la épo
"Martina", la mascota del Parque del Oriente
La vegetación que existe dentro del Parque Deportivo del Oriente fue la ideal para convertirse en el nuevo hogar de una hembra coatí de nariz blanca, especie que ha habitado desde hace más de 15 años en los alrededores y a quien personal y deportistas del lugar han llamado cariñosamente "Martina", la mascota que se ha convertido en la favorita de los visitantes. Mientras "Martina" se pasea entre los árboles de las canchas de basquetbol, muchos curiosos se acercan para alimentarla con frutas y a su vez aprovechan para sacarle fotos, así como acariciarla. Personal encargado de la supervisión del parque, asegura que es un animal que con el tiempo se ha domesticado y se ha acostumbrado al contacto con las personas, lo que hace que no sea considerado un animal peligroso. Esta especie es comúnmente conocida como tejón mexicano, sin embargo, el nombre real de esta especie es coatí o "Nasua narica", y nada tiene que ver con el tejón, el cual sólo habita en Europa. Esta confusión en los nombres se remonta desde la épo