Niluyarilu, la sagrada luz que cobija al Niño Dios

Con fortaleza y devoción, en su espalda cargan la flor sagrada de Niluyarilu cortada en la zona Alta de Mitzitón, Chiapas; tras su paso por el paraje de Navenchuac, municipio de Zinacantán, fueron recibidos por indígenas tsotsiles para celebrar un acervo vetusto y cultural. El esplendor glorioso de los primeros rayos del sol, los acompañó mientras descendían del cerro a marcha forzada, pasando por un rancho de nombre El Rodeo en dirección a la gran celebración en el pueblo mágico de Chiapa de Corzo para venerar al Niño Florero. Son los llamados penitentes y guerreros, quienes mentalizados a una complicada pero espiritual travesía, volvieron a cumplir su manda llevándole la flor divina al Niños Dios. Enfilados, con miradas agónicas y respiraciones aceleradas, los soldados de Dios demostraron una vez más su fe y amor incomparable a uno de los santos más benditos para los chiapacorseños, en donde la emblemática Niluyarilu adorna el nacimiento y pesebre del Niño Florero.