No habrá dulces con el “tío pelón”

“No tiene precio ver las caras de felicidad y compartir con la sociedad lo que la vida nos ha dado. A fin de cuentas, es para los niños. Ellos son quienes más lo disfrutan y generar ese momento donde se celebra a los muertitos, pero también celebras la vida, es invaluable”, dice el “tío pelón”, Juan Carlos Mendoza Castañeda. Relata que llevan 20 años con la tradición de dar dulces y empezó como algo tranquilo, pues mientras él salía a pedir dulces, doña Anita se quedaba a repartir en una mesa. El “tío pelón” describe a su madre como una maestra ejemplar que siempre tuvo grandes detalles para con los niños y puso en alto los actos de compartir y seguir las tradiciones. Entre risas bromea: “Una vez le preguntaron que por qué realizaba el evento, y decía que era porque su hijo mayor había fallecido… Ya después pusimos en el Facebook que sí seguía vivo, que era yo”. Mendoza Castañeda relata que cuando fue a estudiar a la Ciudad de México, era el encargado de traer los dulces, debido a que salían más baratos. Y r