¡No las mate!: mariposas negras no están malditas

Estigmatizadas socialmente como acarreadoras de la muerte y los malos presagios, su mala fama ha provocado la reducción de las poblaciones de la Ascalapha odorata, o popularmente conocida como “mariposa negra”, dijo el académico del Departamento de Conservación de la Biodiversidad del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), Benigno Gómez y Gómez. La maldición está en el nombre, pues explicó que Ascálafo era hijo de Aqueronte, el encargado de cruzar el río del Hades; y fue convertido en ave nocturna para vigilar la oscuridad. Se trata de una mariposa nocturna o polilla, distribuida del sur al norte del continente americano; en Chiapas vive en las regiones de bosques y zonas tropicales. Dentro de las creencias más populares, se considera que es el alma de un ser querido que nos viene a visitar, el presagio de que alguien se va a morir o un aviso de que alguien va a venir a vernos. “Es una mariposa de hábitos nocturnos y llega a los hogares atraída por los focos de las casas en el inicio de la temporada de lluvias