Ya nadie recuerda al rey, muchas veces desenterrado

En Frontera Corozal ya nadie recuerda aquella hermosa piedra, pretexto de violencia hace 4 lustros. En la cabecera de Ocosingo los mandos de la Policía local dicen desconocer del secuestro de dicha pieza arqueológica de mil años que contiene datos de un gobernante maya y una fecha especial. Este mes de junio se cumplen 20 años de un lamentable incidente que de facto detuvo toda investigación de campo en la zona de El Cayo, México, extensa región cercana a la Biosfera de Montes Azules, cuando colonizadores indígenas atacaron con violencia extrema a un grupo de arqueólogos. Eran los últimos días del sexto mes del tormentoso 1997, el viernes 23, cuando los arqueólogos mexicanos Armando Anaya, Nazario Magaña y Mario Aliphat, así como el epigrafista australiano Peter Mathews, y un grupo de locales preparaban el traslado a sitio seguro del hoy famoso Altar 4 de El Cayo. El asalto Antes habían hecho un acucioso trabajo de registro del sitio. Notaron que la pieza había sido forzada, luego de que ellos la habían desen