Parceros y Casa Marina se vieron las caras en la gran final de la Liga Palapa de Futbol 7. El duelo celebrado en las instalaciones de la Cueva del Tigre fue considerado uno de los más cardiacos de este último mes, pues el campeón se tuvo que definir hasta la tanda de los penales. Los nuevos monarcas no erraron ninguno de sus tiros, mientras que Fidel Herrera falló para Parceros en un momento crucial. Debido a la calidad de jugadores en la cancha, más de una persona asistió al espacio deportivo para presenciar la final. A pesar de que hubo varias llegadas en la primera parte, ninguno de los dos planteles se hizo daño y se fueron al descanso con un apretado 0-0 que no dictaminaba nada para nadie. Apenas arrancando el segundo lapso, Roberto Penagos se encontró una pelota votando y el elemento no dudó en pegarle de primera. Ante la sorpresa de todos los presentes, el esférico se fue directo al ángulo izquierdo, convirtiéndose en una pelota imposible de sacar para el guardavallas rival y se incrustó entre los tr
Casa Marina se corona en los penales
Parceros y Casa Marina se vieron las caras en la gran final de la Liga Palapa de Futbol 7. El duelo celebrado en las instalaciones de la Cueva del Tigre fue considerado uno de los más cardiacos de este último mes, pues el campeón se tuvo que definir hasta la tanda de los penales. Los nuevos monarcas no erraron ninguno de sus tiros, mientras que Fidel Herrera falló para Parceros en un momento crucial. Debido a la calidad de jugadores en la cancha, más de una persona asistió al espacio deportivo para presenciar la final. A pesar de que hubo varias llegadas en la primera parte, ninguno de los dos planteles se hizo daño y se fueron al descanso con un apretado 0-0 que no dictaminaba nada para nadie. Apenas arrancando el segundo lapso, Roberto Penagos se encontró una pelota votando y el elemento no dudó en pegarle de primera. Ante la sorpresa de todos los presentes, el esférico se fue directo al ángulo izquierdo, convirtiéndose en una pelota imposible de sacar para el guardavallas rival y se incrustó entre los tr