Nuevas experiencias, logros, alegrías y aprendizajes a través del balón conforman la particular historia de Mónica Sánchez, futbolista originaria de El Parral, Chiapas, y quien hace unos años trascendió a nivel mundial gracias al documental “The Beautiful Game”, en Netflix. Hoy, a las puertas de cumplir tres décadas de vida, la bajita jugadora —mide 1.55 metros— se dedica al entrenamiento deportivo para adultos y es además entrenadora infantil de Futbol, si bien se graduó como licenciada en Desarrollo Humano, carrera mediante la cual —afirma— busca ayudar a más personas a superarse como ella lo ha hecho. En entrevista para “Cuarto Poder”, la campeona mundial con México en Street Soccer (2018) recordó lo vivido junto a personas con historias de vida difíciles, algunas en situación de calle, con problemas familiares graves o que fueron víctimas de las drogas. Mónica, ¿cómo empezaste en el Street Soccer? Lo conocí en 2012. Me invitaron a un nacional porque no tenían portera. No sabía de qué trataba, me enseñaro
Mónica Sánchez, estrella del Street Soccer
Nuevas experiencias, logros, alegrías y aprendizajes a través del balón conforman la particular historia de Mónica Sánchez, futbolista originaria de El Parral, Chiapas, y quien hace unos años trascendió a nivel mundial gracias al documental “The Beautiful Game”, en Netflix. Hoy, a las puertas de cumplir tres décadas de vida, la bajita jugadora —mide 1.55 metros— se dedica al entrenamiento deportivo para adultos y es además entrenadora infantil de Futbol, si bien se graduó como licenciada en Desarrollo Humano, carrera mediante la cual —afirma— busca ayudar a más personas a superarse como ella lo ha hecho. En entrevista para “Cuarto Poder”, la campeona mundial con México en Street Soccer (2018) recordó lo vivido junto a personas con historias de vida difíciles, algunas en situación de calle, con problemas familiares graves o que fueron víctimas de las drogas. Mónica, ¿cómo empezaste en el Street Soccer? Lo conocí en 2012. Me invitaron a un nacional porque no tenían portera. No sabía de qué trataba, me enseñaro