Mariana y Santiago Arriaga tenían 6 y 4 años de edad respectivamente cuando su padre, el escritor Guillermo Arriaga, autor de Amores perros y Los tres entierros de Melquiades Estrada, creó la obra A cielo abierto. Pasaron más de dos décadas para que los hermanos tomaran ese texto y lo convirtieran en película, ahora en posproducción, pero que verá luz el mes próximo en el Festival Internacional de Cine de Venecia, en la sección Orizzonti. Cuenta la vida de dos hermanos adolescentes quienes, junto a su hermanastra, emprenden un viaje de carretera hasta la frontera México-EU para dar con el responsable del accidente que causó la muerte de su padre. “La peli es un guión, una historia que se escribió en 1996 y como mucho de lo que escribe nuestro padre sucede en el Estado de Coahuila, una entidad por el cual nos ha contagiado la pasión”, cuenta Santiago desde Argentina, donde se están dando los toques finales al largometraje. “Desde que estábamos chicos nos decía ‘miren, lo que escribí sucede acá y acá’, y entonc
A cielo abierto se estrena en cines
Mariana y Santiago Arriaga tenían 6 y 4 años de edad respectivamente cuando su padre, el escritor Guillermo Arriaga, autor de Amores perros y Los tres entierros de Melquiades Estrada, creó la obra A cielo abierto. Pasaron más de dos décadas para que los hermanos tomaran ese texto y lo convirtieran en película, ahora en posproducción, pero que verá luz el mes próximo en el Festival Internacional de Cine de Venecia, en la sección Orizzonti. Cuenta la vida de dos hermanos adolescentes quienes, junto a su hermanastra, emprenden un viaje de carretera hasta la frontera México-EU para dar con el responsable del accidente que causó la muerte de su padre. “La peli es un guión, una historia que se escribió en 1996 y como mucho de lo que escribe nuestro padre sucede en el Estado de Coahuila, una entidad por el cual nos ha contagiado la pasión”, cuenta Santiago desde Argentina, donde se están dando los toques finales al largometraje. “Desde que estábamos chicos nos decía ‘miren, lo que escribí sucede acá y acá’, y entonc