El amor y la resiliencia se entrelazan en la telenovela A.mar, donde el amor teje sus redes, una historia que, explica su productor Ignacio Sada, rompe con los esquemas tradicionales del melodrama. En esta narrativa, precisa el productor, la protagonista no es una mujer que espera ser rescatada, sino alguien cuya determinación y carácter terminan conquistando al protagonista. “La trama apuesta por una visión contemporánea del romance, en la que la fuerza y la autosuficiencia femenina se convierten en el eje central de la historia”, señala. Estrella, el personaje principal interpretado por Eva Cedeño representa a una mujer que no necesita apoyo para salir adelante, en lugar del clásico relato en el que la heroína depende del amor del protagonista para resolver sus problemas; aquí el vínculo surge del reconocimiento mutuo y la admiración por la fortaleza del otro. “Esta premisa permite explorar un tipo de relación basada en la equidad y el respeto, alejándose de las narrativas convencionales del género”, indica
A.mar “libera” a la mujer actual
El amor y la resiliencia se entrelazan en la telenovela A.mar, donde el amor teje sus redes, una historia que, explica su productor Ignacio Sada, rompe con los esquemas tradicionales del melodrama. En esta narrativa, precisa el productor, la protagonista no es una mujer que espera ser rescatada, sino alguien cuya determinación y carácter terminan conquistando al protagonista. “La trama apuesta por una visión contemporánea del romance, en la que la fuerza y la autosuficiencia femenina se convierten en el eje central de la historia”, señala. Estrella, el personaje principal interpretado por Eva Cedeño representa a una mujer que no necesita apoyo para salir adelante, en lugar del clásico relato en el que la heroína depende del amor del protagonista para resolver sus problemas; aquí el vínculo surge del reconocimiento mutuo y la admiración por la fortaleza del otro. “Esta premisa permite explorar un tipo de relación basada en la equidad y el respeto, alejándose de las narrativas convencionales del género”, indica