El día que Giovanna Romo tenía que tirarle un vaso de agua al rostro de Sergio Mayer no le costó trabajo. Ni siquiera hubo ensayos, porque era tanta la adrenalina que debía estar en ella que solo podía hacer una toma. En la secuencia de ¡Qué huevos, Sofía!, cinta que llega este jueves a salas mexicanas, la integrante de Backdoor está furiosa porque su jefe no la toma en cuenta, así que se sube a una mesa, desde donde lo encara. “Sergio me dijo ‘entre más me odies, mejor’. Se necesitaba una energía especial y todo quedó en una toma”, recuerda Giovanna. La escena es crucial: es cuando su personaje renuncia a la pastelería en que lleva años trabajando, esperando un mejor puesto, pero eso le es otorgado a la recomendada de un ejecutivo. Junto con otras compañeras y un gay, inicia una empresa competidora, pero su antiguo jefe no se quedará con las manos cruzadas. “El personaje no es machista, sino un cabrón. Hay una escena donde le dice a ella que le hace cosas, no por ser mujer, sino porque es débil. Trata mal a
Con ganas de hacer justicia
El día que Giovanna Romo tenía que tirarle un vaso de agua al rostro de Sergio Mayer no le costó trabajo. Ni siquiera hubo ensayos, porque era tanta la adrenalina que debía estar en ella que solo podía hacer una toma. En la secuencia de ¡Qué huevos, Sofía!, cinta que llega este jueves a salas mexicanas, la integrante de Backdoor está furiosa porque su jefe no la toma en cuenta, así que se sube a una mesa, desde donde lo encara. “Sergio me dijo ‘entre más me odies, mejor’. Se necesitaba una energía especial y todo quedó en una toma”, recuerda Giovanna. La escena es crucial: es cuando su personaje renuncia a la pastelería en que lleva años trabajando, esperando un mejor puesto, pero eso le es otorgado a la recomendada de un ejecutivo. Junto con otras compañeras y un gay, inicia una empresa competidora, pero su antiguo jefe no se quedará con las manos cruzadas. “El personaje no es machista, sino un cabrón. Hay una escena donde le dice a ella que le hace cosas, no por ser mujer, sino porque es débil. Trata mal a