Las grandes exhibiciones que el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) ha anunciado con bombo y platillo, desplegando intensas campañas de promoción, no sólo se traducen en números alentadores de visita sino también en erogaciones públicas millonarias. Organizar cuatro de las más publicitadas exposiciones que se han montado en los últimos meses en la Ciudad de México, ha significado un gasto de más de 32 millones 293 mil pesos para el país. De este conjunto, la exhibición más costosa ha sido «Miguel Ángel Buonarroti. Un artista entre dos mundos» que se exhibió hasta el 27 de septiembre pasado en el Palacio de Bellas Artes con un presupuesto de 11 millones 688 mil 490 pesos, sin incluir los gastos por derechos de exhibición y de promoción que aún se encuentran en proceso de formalización. De acuerdo con datos proporcionados a Excélsior a través de solicitudes de información pública, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) reportó que exhibiciones como la de Yayoi Kusama, «Obsesión infini
¿Cuánto cuestan las grandes exposiciones de arte?
Las grandes exhibiciones que el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) ha anunciado con bombo y platillo, desplegando intensas campañas de promoción, no sólo se traducen en números alentadores de visita sino también en erogaciones públicas millonarias. Organizar cuatro de las más publicitadas exposiciones que se han montado en los últimos meses en la Ciudad de México, ha significado un gasto de más de 32 millones 293 mil pesos para el país. De este conjunto, la exhibición más costosa ha sido «Miguel Ángel Buonarroti. Un artista entre dos mundos» que se exhibió hasta el 27 de septiembre pasado en el Palacio de Bellas Artes con un presupuesto de 11 millones 688 mil 490 pesos, sin incluir los gastos por derechos de exhibición y de promoción que aún se encuentran en proceso de formalización. De acuerdo con datos proporcionados a Excélsior a través de solicitudes de información pública, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) reportó que exhibiciones como la de Yayoi Kusama, «Obsesión infini