Cumbres Borrascosas

Un hombre llamado Lockwood llega a la finca Cumbres Borrascosas para conocer al señor Heathcliff, su casero, que le ha alquilado una villa cercana, la Granja de los Tordos. El recibimiento no puede ser más frío, hostil y desagradable. En la casa viven otras dos personas, Catherine, una hermosa joven de piel como alabastro y hermosos ojos azules, y el cabello con definidos rizos dorados, y Hareton Earnshaw, un joven alto, tosco y moreno, con apariencia torpe. Los tres personajes le parecen a Lockwood incomprensiblemente toscos y amargados. La señora Dean, que sirve a Lockwood en la Granja de los Tordos y cuidó de ellos cuando eran niños, le cuenta la historia de las dos familias que viven en la zona, los Linton y los Earnshaw. El señor Earnshaw, dueño de Cumbres Borrascosas, trajo un día a su casa a Heathcliff, un niño abandonado, para criarlo como suyo. Los hijos de Earnshaw recibieron con extrañeza a Heathcliff. Con el tiempo, la hija, Catherine, se hizo buena amiga de él, pero el hijo mayor, Hindley, lo de