Dale una segunda vida a la cáscara

Hay aguacates con la piel muy delgadita, como es el caso del criollo en donde se come sin problemas dejando un sabor agradable en boca, con un toquecito de anís. Es perfecto para los taquitos y para agregar en sopas. En el caso de la variedad Hass, su cáscara es más gruesa y rugosa. Por lo tanto, no será recomendable comerla pues puede afectar la digestión. Aun así, su cáscara tiene nobleza y usos culinarios. Beneficios de la infusión de cáscara de aguacate Esta infusión te ayudará a mejorar tu digestión. Algunos estudios dicen que la cáscara en infusión ayuda a eliminar parásitos intestinales, cortar la diarrea y detener el estreñimiento. La cáscara del aguacate Hass contiene antioxidantes al ser alto en taninos, así como un alto porcentaje de, proteína y lípidos cuando está seca. ¿Cómo se prepara la infusión de cáscara de aguacate? Lo primero es retirar toda la carne del aguacate y lavar la cáscara bajo el chorro de agua con ayuda de una esponja. Secarla completamente y dejarla secar al sol sobre una char