De campos de concentración a museos

Durante la Segunda Guerra Mundial, el nazismo asesinó a casi seis millones de personas, entre ellos homosexuales, gitanos y judíos. A ocho décadas de estos hechos, es importante entender que la ideología antisemita es producto de siglos de hostilidad hacia esos grupos, además del racismo y el sentimiento de nacionalismo exacerbado que surgió en Alemania durante el mandato de Adolfo Hitler. Discursos como los de aquel momento aún se perpetúan contra diversos grupos. Por eso, hoy más que nunca es imprescindible entender que las diferencias no son motivo de conflicto; por el contrario, enriquecen a la humanidad. Auschwitz fue el más famoso y letal campo de concentración y exterminio establecido durante el régimen nazi. Construido en 1940 durante la invasión alemana a Polonia, fue el principal de los seis centros de exterminio y cientos de campos de concentración y trabajo que se establecieron a lo largo de Europa. En este, murieron más de un millón de personas, es decir una de cada seis víctimas del genocidio,