“Con su poesía erótica, creó un lenguaje propio donde la mujer ya no era el objeto del placer o del deseo, sino el sujeto del eros”, afirma Claudia Posadas sobre la poeta uruguaya Delmira Agustini (1886-1914). “Es un ícono de la liberación, del derecho de la mujer a su sexualidad, a ser dueña de su cuerpo y de su placer; también es un ejemplo de mujeres cultas, realmente fuera de serie para su época”, agrega Patricia Rosas Lopátegui. Una de las pocas poetas que irrumpió y superó la corriente literaria del Modernismo, la obra de Agustini, que cimbró a la sociedad con sus versos eróticos, permanece casi en el olvido al llegar a su 110º aniversario luctuoso, que se conmemora el 6 de julio. Famosa por su mirada singular sobre el deseo femenino y por su belleza, la autora de El libro blanco (1907), Cantos de la mañana (1910) y Los cálices vacíos (1913), que prologó Rubén Darío, se convirtió en una leyenda pero no por su propuesta literaria, sino porque su esposo, Enrique Job Reyes, de quien se divorció tras 53 día
Delmira, una mirada erótica silenciada
“Con su poesía erótica, creó un lenguaje propio donde la mujer ya no era el objeto del placer o del deseo, sino el sujeto del eros”, afirma Claudia Posadas sobre la poeta uruguaya Delmira Agustini (1886-1914). “Es un ícono de la liberación, del derecho de la mujer a su sexualidad, a ser dueña de su cuerpo y de su placer; también es un ejemplo de mujeres cultas, realmente fuera de serie para su época”, agrega Patricia Rosas Lopátegui. Una de las pocas poetas que irrumpió y superó la corriente literaria del Modernismo, la obra de Agustini, que cimbró a la sociedad con sus versos eróticos, permanece casi en el olvido al llegar a su 110º aniversario luctuoso, que se conmemora el 6 de julio. Famosa por su mirada singular sobre el deseo femenino y por su belleza, la autora de El libro blanco (1907), Cantos de la mañana (1910) y Los cálices vacíos (1913), que prologó Rubén Darío, se convirtió en una leyenda pero no por su propuesta literaria, sino porque su esposo, Enrique Job Reyes, de quien se divorció tras 53 día