La Mariposa Monarca, desde hace 41 años, ha encontrado un hogar en los bosques del centro de México entre los meses de noviembre y marzo. La Reserva de la Biósfera (que lleva el nombre de este lepidóptero y es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) está conformada por más de 16,100 hectáreas que comprenden los municipios de Contepec, Senguío, Angangueo, Ocampo, Zitácuaro y Áporo, en Michoacán; y Temascaltepec, San Felipe del Progreso, Donato Guerra y Villa de Allende, en el Estado de México. Este magnífico fenómeno natural (donde millones de mariposas anaranjadas que recorrieron más de 8,000 kilómetros desde el sur de Canadá y norte de Estados Unidos cubren los árboles de oyamel, pino y cedro para hibernar) es apreciable en cinco santuarios de estas entidades.
DESCAPADA
La Mariposa Monarca, desde hace 41 años, ha encontrado un hogar en los bosques del centro de México entre los meses de noviembre y marzo. La Reserva de la Biósfera (que lleva el nombre de este lepidóptero y es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) está conformada por más de 16,100 hectáreas que comprenden los municipios de Contepec, Senguío, Angangueo, Ocampo, Zitácuaro y Áporo, en Michoacán; y Temascaltepec, San Felipe del Progreso, Donato Guerra y Villa de Allende, en el Estado de México. Este magnífico fenómeno natural (donde millones de mariposas anaranjadas que recorrieron más de 8,000 kilómetros desde el sur de Canadá y norte de Estados Unidos cubren los árboles de oyamel, pino y cedro para hibernar) es apreciable en cinco santuarios de estas entidades.