Eduardo Capetillo Jr., hijo de Biby Gaytán, visitó por primera vez a su hermana Alejandra en España, luego de que ella se mudara a Europa hace cinco años. Durante su estadía, el cantante de 30 años tuvo la oportunidad de acompañarla en un momento especial: los preparativos de su boda con Nader Shoueiry, su novio libanés. A través de su cuenta de Instagram, Ale compartió que su hermano conocería a algunos de sus amigos más cercanos, entre ellos la diseñadora de su vestido de novia. Además, sería testigo de una prueba del atuendo, algo que emocionaba mucho a la joven modelo. Alejandra, indecisa sobre cómo peinarse para el gran día, comentó: “No sé si quiero ser una novia casualona, pero a la vez elegante”. En otro clip que publicó en la plataforma, se observa a Eduardo nervioso mientras estaba en el local de vestidos esperando a Alejandra, y aunque el look de ella se mantuvo en secreto, pues en todo momento la cámara estaba grabando el rostro de Lalo, este expresó visiblemente conmovido: “¡Ay, Ale, te ves preci
Eduardo Capetillo Jr. visita España
Eduardo Capetillo Jr., hijo de Biby Gaytán, visitó por primera vez a su hermana Alejandra en España, luego de que ella se mudara a Europa hace cinco años. Durante su estadía, el cantante de 30 años tuvo la oportunidad de acompañarla en un momento especial: los preparativos de su boda con Nader Shoueiry, su novio libanés. A través de su cuenta de Instagram, Ale compartió que su hermano conocería a algunos de sus amigos más cercanos, entre ellos la diseñadora de su vestido de novia. Además, sería testigo de una prueba del atuendo, algo que emocionaba mucho a la joven modelo. Alejandra, indecisa sobre cómo peinarse para el gran día, comentó: “No sé si quiero ser una novia casualona, pero a la vez elegante”. En otro clip que publicó en la plataforma, se observa a Eduardo nervioso mientras estaba en el local de vestidos esperando a Alejandra, y aunque el look de ella se mantuvo en secreto, pues en todo momento la cámara estaba grabando el rostro de Lalo, este expresó visiblemente conmovido: “¡Ay, Ale, te ves preci