El bordado tiene una función antropológica

El tejido y el bordado realizados por mujeres indígenas mexicanas es una práctica política que enuncia y denuncia violencia, aseguró la antropóloga Mariana Rivera García durante su participación en la Segunda Semana de Género, Arte y Diversidad que se realiza en la Universidad Iberoamericana. En su ponencia “Tejer y resistir, etnografías audiovisuales y narrativas textiles”, la especialista explicó que mujeres indígenas de México, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, por citar algunos países de Latinoamérica, hablan a través de sus tejidos del destierro, el dolor, el sufrimiento, la esperanza, la fe y la resistencia. La académica de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) agregó que las indígenas se dieron cuenta que al reunirse a tejer adquirían “todo el potencial para contar historias difíciles que no era sencillo contar individualmente, y se ponían a crear y a sanar estas heridas en colectivo”. Explicó que el uso del tejido para denunciar violencia surgió en los años 70 durante la dictadura de Augusto Pino